Tuvo una vida azarosa que le llevó del comunismo al Opus Dei. Y todo ese proceso se narra en el libro «Carlos Martínez, pescadero», que lleva por subtítulo «Un revolucionario que encontró a Dios» y que ayer se presentó en el auditorio Príncipe Felipe. José Antonio Íñiguez y el periodista de LA NUEVA ESPAÑA Pablo Álvarez han querido que la memoria de este ovetense no se pierda y por eso han recopilado e hilado los escritos que Carlos el pescadero fue dejando desde 1975. El periodista Juan de Lillo resumió con una frase la experiencia vital de este singular ovetense: «La vida de nuestro pescadero da para hacer una novela de éxito». De familia numerosa y humilde, tuvo que dejar la escuela con 9 años y a los 10 era miembro del comité comunista de su barrio. En 1954 ingresó en la Obra y desde entonces su vida se centró en ayudar a los más desfavorecidos. Lo hizo desde su pescadería que tuvo en el Fontán.