Ch. N.

La asamblea convocada ayer por SOS Cultura, el movimiento que ha logrado que se recupere la Fundación Municipal de Cultura en el Ayuntamiento de Oviedo, o al menos que se intente, convocó ayer una de sus ya tradicionales asambleas abiertas en el salón de actos de la Biblioteca Pública de Asturias, en el Fontán, para repasar logros y analizar próximos objetivos. El más evidente, en el primer capítulo, es el ya referido: SOS Cultura ha logrado que el Pleno municipal apruebe, con un acuerdo de mínimos entre los partidos, la intención de rescatar la Fundación Municipal de Cultura. El problema, ahora, es cómo, cuándo y por qué. Pero precisamente SOS Cultura aprobó ayer la creación de un nuevo organismo que nace con vocación de ayudar a los políticos ovetenses a poner en marcha la Fundación Municipal de Cultura. El invento se llama Consejo Ciudadano de Participación Cultural y la pretensión es que en él estén representadas todas las asociaciones de vecinos y las de actividad cultural que haya en Oviedo.

A ese Consejo Ciudadano han llegado los de SOS Cultura tras una ronda de contactos, más o menos formales según los casos, con el mayor número posible de asociaciones culturales. Y encontrar «una buena respuesta», dicen, en la mayor parte de los casos. Desde los Amigos de la Ópera hasta la Escuela de Arte, pasando por Tribuna Ciudadana, por citar a tres, SOS Cultura ha querido involucrar al mayor número posible de asociaciones en este Consejo.

Ahora, la hoja de ruta dice que ese Consejo Ciudadano de Participación Cultural, una vez que esté formado, podrá asesorar a los grupos políticos a la hora de tomar decisiones culturales, y también para decidir qué modelo de Fundación Municipal de Cultura se pone en marcha.

El Consejo, sin embargo, todavía no está creado. Del acuerdo tomado ayer para ponerlo en marcha habrá que pasar, en fecha todavía sin determinar, a una asamblea en la que SOS Cultura moderará y donde participarán, no ya cualquier ciudadano, sino cualquier asociación, vecinal o cultural que quiera formar parte del Consejo Ciudadano de Participación Cultural.

Con todo, en la asamblea sí se tomaron decisiones referidas a la Fundación Municipal de Cultura, para transformarlas en peticiones dirigidas al Ayuntamiento: quieren que el presidente de la futura Fundación Municipal de Cultura salga de un concurso público con bases claras. También, que la Fundación se encargue de la gestión de las bibliotecas. Y que se haga un inventario de los activos culturales. La asamblea de ayer también mostró su apoyo al escultor Alba, cuya obra retirada no ha sido todavía repuesta, y a las emisoras libres QK y Sele, amenazadas de cierre.