La fecha, el mal tiempo, los precios de las entradas y la ausencia de grandes figuras dieron al traste con las perspectivas del sector hostelero local en torno a la Copa Davis. Resumiendo, y aun sin que estén elaborados los datos concluyentes de las distintas asociaciones del sector turístico ovetense, ni el impacto económico de este evento en la ciudad fue de tres millones de euros, ni los seis mil espectadores acudieron al Palacio de los Deportes. El problema, fechas y climatología.
«Si se hubiera celebrado en la primavera o en el verano, todo hubiera sido muy distinto», señaló Paco Colunga, presidente del colectivo de las sidrerías de la calle Gascona. No obstante, en la calle sidrera por excelencia sí notaron la presencia de grupos vinculados a la Copa Davis, aunque Colunga insistió en que «no se cumplieron las expectativas».
El presidente de las agrupaciones locales de Hostelería de Asturias, Miguel Ángel de Dios, añadió que los visitantes, en general, comían y cenaban en sus hoteles, «y los de Asturias, después de los partidos, se marchaban directamente a sus casas».
Desde Distrito Gourmet, en el entorno de la avenida de Galicia, su representante, Javier Díaz-Faes, dice que durante el fin de semana sí notaron más afluencia, pero de ovetenses; igual que señaló José Soto, propietario de Punto y Coma y del Faro Vidío.
Al menos los hoteles participantes en la competición sí vieron cumplidas sus expectativas, como fue el caso de Ayre, NH Principado, AC, el Magistral y el Barceló, entre otros.
