Según el astrónomo Varaja Mijira, tal día como hoy, en 3102 a. C., comenzó la era «Kali iuga», que durará 432.000 años. En sánscrito «iugá» significa era, y «kali», la cara del dado marcada con un punto, el lado perdedor. Kali trató de matar a una vaca, fue detenido por el rey Paríkshit y eso provocó una guerra; la era comenzó cuando, al atardecer, los dos ejércitos se negaron a detenerse para orar y siguieron matándose. En nuestro parchís moderno, los lados mejores del dado son el cinco, necesario para salir de casa, y el seis, que permite avanzar mientras el resto del mundo aguarda turno; el uno, o el punto, es la mínima expresión del progreso, un sólo pasito, como el del rey en el ajedrez español. Pero con los dados que la Merkel puso sobre el tapete, la crisis española puede eternizarse: hay caras con puntos negativos para que podamos comernos marcha atrás.
