E. VÉLEZ

Las seis cajas de radar instaladas en la ciudad desde hace tres meses dejarán de ser un simple mueble urbano para convertirse, a partir de la próxima semana, en un freno para los conductores. Los dispositivos medirán la velocidad de los vehículos que circulen por las zonas urbanas, donde, según la Policía Local, los ciudadanos cometen más infracciones de tráfico, para posteriormente tramitar una multa.

El tramo de la «Y» que da acceso a la ciudad, la calle Independencia, los dos sentidos del paseo de La Florida, la calle Favila y Muñoz Degraín lucen ya un armario de radar que el Centro Español de Metrología (CEM) debe certificar. A partir de entonces, un único radar controlará la velocidad en las seis zonas, de tal manera que rotará por cada una de las cajas por un espacio de tiempo determinado y «sin que los ciudadanos lo adviertan ni sepan cuándo el radar está instalado o no», asegura el intendente de la Policía Local, Manuel Secades.

El dispositivo ya ha pasado los controles técnicos pertinentes y su puesta en marcha sólo depende de la revisión de los armarios y la instalación de la señalización pertinente, es decir, de los paneles que indican al conductor la presencia de un control de velocidad unos metros antes del mecanismo. Según la Policía Local, los radares estarán «en período de pruebas» a lo largo de una semana, para después funcionar a pleno rendimiento y comenzar a multar a los infractores.

El tramo de la «Y» justo debajo de la pasarela de unión entre el barrio de Ventanielles y el centro comercial Los Prados, por el que se debe circular a 50 kilómetros por hora, tendrá un radar que no sólo regulará la velocidad a la entrada de Oviedo, sino que, según la Policía Local, acabará con la contaminación y los altos niveles de ruido que soportan los barrios aledaños de la autopista, como Guillén Lafuerza.

Para la instalación de los radares, la Policía ha tenido en cuenta la opinión de los ciudadanos, recabada en los últimos meses a través de diversas reuniones entre los agentes y diversas asociaciones vecinales, además de las denuncias interpuestas por exceso de velocidad. Así, Muñoz Degraín, una de las vías que soportan mayor densidad de tráfico, según los informes de la Policía, contará con un radar, al igual que la calle Independencia en su confluencia con Ingeniero Marquina y la avenida de Santander.

La salida hacia San Claudio es uno de los lugares que más denuncias por exceso de velocidad ha registrado en los últimos años, por lo que la Policía ha instalado un dispositivo de control en el cruce de la calle Favila con Fuente de la Plata.

El paseo de La Florida será el único punto que contará con dos radares: uno en sentido Las Campas y otro en sentido Oviedo.

El nuevo radar de velocidad que comenzará a funcionar dentro de la ciudad a lo largo de la próxima semana irá instalado en unos modernos armarios ubicados en seis puntos de Oviedo: el tramo de la «Y» que da acceso a la ciudad, la calle Independencia, los dos sentidos del paseo de La Florida, la calle Favila y Muñoz Degraín (en la imagen). El dispositivo rotará por cada una de las cajas instaladas en la ciudad para medir la velocidad y, en algunos casos, evitar la contaminación acústica.