La fotografía
A la entrada de Oviedo, en la zona urbana de la autopista «Y», concretamente en la unión entre el barrio de Ventanielles y el centro comercial Los Prados, por el que se debe circular a 70 kilómetros por hora, fue donde se colocó ayer el radar, que «cazó» a varios conductores.
El exterior
Los radares son fácilmente identificables ya que se encuentran situados sobre lo alto de un poste metálico, donde si sitúa la caja, con visera, en la que aparecen dos objetivos: uno corresponde a la cámara fotográfica y el otro es el sensor que detecta la velocidad.
Monitor
La pantalla del monitor del radar sitúa la fotografía del automóvil infractor en el centro de la imagen, y registra en la zona superior la velocidad exacta, así como la hora, el día, mes y año en el que se cometió la infracción. En la fotografía, uno de los coches controlados ayer.
El interior
En el interior de los radares hay todo un sofisticado ordenador que detecta la velocidad exacta a la que circulan los vehículos, así como la hora y el lugar, además de hacerle una fotografía en el momento preciso en el que cometió la infracción, que pasa a una base de datos.
