Carolina G. MENÉNDEZ

Oviedo carece de una ordenanza municipal específica que regule la parada y estacionamiento de autocaravanas en las vías urbanas, así como un área de servicios para la pernocta de estos vehículos, dos necesidades reiteradamente demandadas desde el Club Autocaravanista del Principado de Asturias (CAPA), que preside Isaac García Palacios. Para subsanar este déficit, el Grupo municipal Socialista ha solicitado al Ayuntamiento la elaboración de la legislación correspondiente, «que debe incluir, entre otras cuestiones, la prohibición de acampar libremente, el período máximo de estacionamiento y pernocta en vías urbanas y las condiciones en las que una autocaravana se encuentra aparcada y no acampada», según ha puesto de manifiesto Laura Díez Prieto. Igualmente, la concejala socialista insta al Ayuntamiento a construir un área de servicio para estos vehículos dotado con un punto limpio ecológico, para la recogida y tratamiento de residuos y el suministro de agua.

La falta de un espacio que reúna las citadas características limita la presencia de autocaravanistas en Oviedo, «una ciudad muy visitada por su Prerrománico», señala Isaac García Palacios, para quien la independencia que proporciona la disponibilidad inmediata es el argumento más poderoso para utilizar una autocaravana, «ya que permite iniciar un viaje sin reservar previamente el alojamiento». Pero para aprovechar esta autonomía, apunta, «sólo necesitamos una zona en la que gestionar los residuos; es decir, rellenar el agua limpia y vaciar las aguas jabonosas procedentes del lavabo, fregadero y ducha, así como los restos orgánicos del váter».

La existencia de un punto limpio, y máxime si forma parte de un área para estacionar y pernoctar, atraería a más autocaravanistas a la ciudad, reconoce el presidente de CAPA y, como consecuencia, mayor volumen de ingresos por turismo. Porque, comenta García Palacios, el usuario de la autocaravana (generalmente centroeuropeo, jubilado, mayor de 50 años, con ingresos que superan los 3.000 euros al mes y que viaja en pareja o con la familia) es un turista de nivel medio-alto que gasta aproximadamente 40 euros al día y viaja entre 45 y 100 días al año.

«Estamos perdiendo un turismo interesante. Oviedo es un lugar importante para el viajero, pero no se queda; llega, estaciona, ve el Prerrománico y se va. Por eso es fundamental que se apruebe la ordenanza municipal y, después, se ponga en marcha un área con un punto de carga y descarga», manifiesta García Palacios.

El autocaravanismo es un turismo no estacional que en España ha aumentado en el último año, según ponen de manifiesto los datos de matriculación; aun así, el parque de autocaravanas, integrado por aproximadamente 35.000 vehículos, está lejos de alcanzar el volumen de otros países de la Unión Europea: Alemania cuenta con 468.000; Italia, con 239.000, y Francia, con 228.000. Muchas de estas unidades, en torno a 400.000, ruedan anualmente por España, bien como destino turístico o de paso hacia Portugal o Marruecos, según recoge una encuesta realizada hace dos años. Dicho estudio también señala que el autocaravanista no pasa más de dos noches en el mismo lugar: «Somos viajeros permanentes, no turistas», confirma el presidente de CAPA, que al igual que el resto de autocaravanistas prepara los viajes, sobre todo los de larga duración, en función de los servicios que posee la región o el país que pretende visitar. «Tenemos páginas específicas en internet que nos facilitan esta información, básica para la programación de los desplazamientos. Nuestra prioridad es ubicar las áreas en las que cargar agua y descargar con periodicidad los residuos; sólo necesitamos un grifo y un desagüe», subraya, para explicar la escasa complejidad que presenta un punto limpio como al que aspira el colectivo en Oviedo. Éste se compone de una plataforma sobre la que se sitúa la autocaravana, que vacía el depósito de aguas usadas en una rejilla conectada al alcantarillado. Un sumidero conectado también al alcantarillado es suficiente para vaciar el depósito de residuos orgánicos. Por último, una fuente suministra agua limpia para rellenar el depósito del vehículo. A falta de esta instalación, muchos autocaravanistas optan por vaciar los depósitos en las gasolineras. Las aguas jabonosas o grises las vierten en los sumideros de los puntos de lavado y las negras, en los váteres.

En Asturias existen quince áreas de servicio para autocaravanas. «La parte occidental está mejor dotada que la oriental y la Senda del Oso es una zona "vip"; de hecho, Santo Adriano fue el primer municipio que puso en marcha una ordenanza que regula el aparcamiento y estacionamiento de las autocaravanas, y ésta fue trasladada al Ayuntamiento de Quirós», explicó García Palacios.

Gijón, un destino importante para los autocaravanistas al llegar a la ciudad costera en ferry procedente de la ciudad francesa de Saint Nazaire, contará próximamente con un área. «En Oviedo esperamos que se apruebe pronto la ordenanza de parada y estacionamiento, y a continuación se haga el área en un entorno urbano seguro y que permita acceder a los servicios de hostelería y tiendas», indica esperanzado el presidente de CAPA, quien desde la asociación que preside ya propuso al Ayuntamiento posibles zonas, hasta el momento rechazadas por razones técnicas.