La querella criminal por injurias planteada por Santa Bárbara contra tres de los 55 despedidos por su actividad en un blog abierto para luchar por su readmisión, sigue su curso después de que ayer ninguna de las partes desistiera de sus posiciones previas en la acto de conciliación celebrado en los juzgados de primera instancia número 10 de Oviedo.

Las dos partes reconocieron que hubo negociaciones previas para evitar que prosiguiera el procedimiento judicial, pero los despedidos de Trubia no aceptaron las condiciones de Santa Bárbara. "Querían que aceptásemos los hechos y no estábamos dispuestos a hacerlo, porque entendemos que no hemos injuriado ni vulnerado el honor de nadie, sólo hemos ejercitado nuestro derecho a la libertad de expresión difundiendo noticias y vídeos generados por otros", explicaron ayer los tres imputados: Luis García, Goyo Marín y Maximino García, que acudieron al juzgado junto a su abogado, Diego Cueva.

Fuentes de la empresa, representada por el abogado Iván Díaz Tamargo, confirmaron la existencia de estas negociaciones y la imposibilidad de llegar a un acuerdo. Ahora la juez debe seguir con el procedimiento, aunque el abogado de los despedidos destacó que han recurrido la admisión a trámite a la vista de varios defectos de forma en el procedimiento.

Los tres trabajadores despedidos de forma directa en Trubia dentro del proceso de ERE, que acudieron al juzgado entre grandes muestras de apoyo, con presencia en la calle de otros compañeros y representantes del PSOE, IU y Foro, insistieron en que el "acoso judicial" que dicen estar sufriendo por parte de la empresa comenzó a partir de noviembre, cuando plantearon nuevas pruebas al Tribunal Supremo dentro del proceso judicial para tratar de tumbar el ERE. Los trabajadores ligan las dos cuestiones, y son muy críticos con el auto de la Audiencia Nacional que acaba de rechazar la inclusión de estos nuevos documentos al entender que no son relevantes y que pudieron ser aportados durante el juicio. Estos papeles, según los demandados, probarían que Santa Bárbara no tuvo 60 millones de pérdidas en 2012, sino sólo 1,9, según sus cuentas consolidadas con su filial alemana.