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El futuro de una industria vital para el concejo

Santa Bárbara contacta con 80 empresas asturianas para sus trabajos en Trubia

Un equipo de la compañía de defensa llegará mañana a la región en busca de proveedores para incorporarlos a contratos nacionales e internacionales

Uno de los blindados que fabrica Santa Bárbara. LNE

La empresa Santa Bárbara Sistemas se reunirá a partir de mañana con ochenta empresas asturianas de distintos sectores con el objetivo de ampliar su lista de proveedores e incorporarlos a sus trabajos nacionales e internacionales. Un equipo del departamento de suministro de la compañía armamentística llegará mañana a la región para reunirse una a una con las empresas seleccionadas, escrutar sus capacidades y explicarles la filosofía y los requisitos de una hipotética colaboración. Las reuniones tendrán lugar mañana y pasado mañana en la fábrica de armas de Trubia y servirán para "analizar las posibilidades de cooperación y explorar cómo ampliar y fortalecer las relaciones", según indican fuentes de la empresa.

Se trata de las primeras jornadas de este tipo que realiza en Asturias Santa Bárbara, que ya organizó algo similar el pasado mes de febrero en su planta en Alcalá de Guadaira (Sevilla) y que aspira a volver a repetir el proceso en un futuro.

Las firmas que participarán en las reuniones son "muy variadas" y pertenecen a distintos ámbitos. Hay grandes, medianas y pequeñas empresas y el filtro para su selección se llevó a cabo con ayuda de las patronales de distintos sectores como el del metal. A algunas de ellas las invitó la propia compañía a participar y otras se ofrecieron voluntariamente. Las sociedades que cumplan los requisitos y sean acreditadas como nuevos proveedores podrán participar en contratos actuales o futuros, a nivel nacional e internacional. Por ejemplo, en la construcción de los 589 vehículos de combate que fueron encargados por el Ministerio de Defensa británico el pasado mes de diciembre y que garantiza nueve años de carga de trabajo en Trubia. O en los nuevos trabajos que puedan surgir, como la opción de construir un contrato multimillonario en Arabia Saudí para la construcción de tanques "Leopard", que se mantiene a la espera del visto bueno de Alemania, o los blindados 8x8 para el transporte de tropas que pretende reactivar el Ministerio de Defensa español.

"Buscamos un efecto tractor en aquellos lugares donde estamos erradicados", comentan fuentes de la compañía armamentística. "Tenemos contratos y ofertas. Hay que tener en cuenta que nuestros productos compiten a nivel nacional e internacional y que nuestra cadena de suministros tiene que tener muy claro eso. Es un nuevo escenario que requiere una organización adaptable y dimensionada. Santa Bárbara quiere ser competitivo a nivel global", añaden las mismas fuentes.

Las reuniones, que se reparten en dos días para que "haya una mejor comunicación entre todos", tendrán dos partes diferenciadas. La primera será una presentación a cargo de un equipo de Santa Bárbara que va más enfocada a repasar de manera general la filosofía de la empresa y las exigencias y las posibilidades del nuevo escenario de actuaciones que se abriría para las empresas seleccionadas. La segunda fase contempla la celebración de reuniones vis a vis entre representantes de Santa Bárbara y de cada una de las empresas a fin de intercambiar opiniones, analizar las capacidades de cada sociedad y escrutar el resto de requisitos con vistas a una futura colaboración. "El sistema de contratación es muy estricto y competitivo y va en función de muchos parámetros", explican desde la compañía, "y lo que queremos hacer es reunirnos con posibles proveedores de la zona para que conozcan qué tienen que hacer para lograrlo y para que tengan en cuenta el nuevo escenario en el que entrarían", añaden.

Concentración de protesta

Por otra parte, los 55 despedidos de Santa Bárbara, extrabajadores de la Fábrica de Armas de Trubia, convocaron ayer una nueva concentración para el próximo martes (13.00 horas a las puertas de la fábrica) para exigir su readmisión y protestar contra lo que consideran "uno de los mayores genocidios laborales de Asturias". Los afectados, que realizan una manifestación cada día 10 de mes, cumplen 22 meses desde que abandonaron su trabajo a causa de un expediente de regulación de empleo (ERE).

Los representantes de los afectados insisten en lograr la nulidad de los despidos tras analizar la sentencia completa del Tribunal Supremo en la que exime a la Audiencia de repetir el juicio y le obliga a emitir un nuevo fallo. Los extrabajadores afirman que no se respetaron los plazos de negociación ni el periodo de consultas del ERE, que no se indicó la clasificación y el número de profesionales afectados, que no se facilitó el listado del personal incluido y que no se presentaron las "cuentas consolidadas y auditadas de la sociedad en 2012".

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