El Gobierno central que preside Mariano Rajoy (PP) reconoce que en la actualidad no tiene planes para dotar de uso el los más de 120.000 metros cuadrados que ocupa el solar de la desaparecida Fábrica de Armas de la Vega. Así consta en la respuesta por escrito a una batería de preguntas realizadas por el diputado asturiano Gaspar Llamazares, candidato de IU a la presidencia del Principado en las elecciones autonómicas del próximo mes de mayo.

"No existe en la actualidad previsión concreta para ellas. En todo caso, tendrán el mismo tratamiento que el resto de la instalaciones del Ministerio de Defensa", reza la respuesta del Ejecutivo central remitida al congresista de la coalición de izquierdas. Con lo de "mismo tratamiento", Madrid deja entrever que el suelo de la Vega seguirá igual destino que otros grandes solares propiedad de Defensa: su venta para recaudar fondos con los que financiarse.

De igual forma, el Gobierno del PP elude solicitar a Santa Bárbara Sistemas, la filial en España de la multinacional General Dynamics, que readmita a los 55 trabajadores despedidos de la Fábrica de Armas de Trubia ante el aumento de la carga de trabajo por la firma de nuevos contratos, como el de la construcción de blindados de transporte de tropas para el ejército británico. El Ejecutivo señala que entre las "atribuciones" del Ministerio de Defensa "no está la de ejercer ese tipo de mediación laboral". Además, señala que Santa Bárbara Sistemas es una empresa privada desde que fue vendida en julio de 2001 por el Estado.

El Ejecutivo de Mariano Rajoy también respondió sobre la polémica de la cesión de maquinaria de las factorías de la Vega y Trubia a la Universidad de Oviedo para la creación de un museo en el campus gijonés de Viesques. La cesión encendió los ánimos del PP local, que tachó la medida de "expolio". En su respuesta a Llamazares, el Gobierno defendió su decisión para dar a conocer "el pasado y presente" de las Fuerzas Armadas.