Alfredo Canteli (Teverga, 1947) se hizo socio del Centro Asturiano en 1971. Un día de finales de los noventa, andando por la calle Uría, alguien se le acercó y le pidió que trabajara para ponerse al frente de la institución. Al principio dijo que no, pero luego llegó a casa, se lo pensó, y aceptó. En 1999 fue elegido presidente de un club que cuenta actualmente con 17.400 socios. En diciembre se presentará a la reelección, que le disputará otra vez Alberto Sanz, al que ya ganó en 2011 por mayoría. Canteli, que se hizo socio en 1971, ha impulsado una campaña de nuevas altas para recuperar abonados, una opción criticada por Sanz porque supondría, dijo, una "masificación" de la institución.
-¿El Centro Asturiano necesita socios?
-Necesita recuperar el nivel social que tenía antes. Perdimos cerca de 1.000 socios con la crisis. Y eso, unido a la figura del socio desplazado, que tenemos 600, y que pagan el 50% de la cuota, significa que los recursos disponibles del Centro se ven mermados en cerca de 300.000 euros al año. Y para una economía tan justa como la nuestra y unas inversiones tan importantes está claro que necesitamos recuperar el nivel de socios que teníamos. Ni uno más, ni uno menos.
-¿Y cuántos son esos?
-En torno a los mil.
-¿Tener 1.000 socios más podría suponer una masificación?
-En absoluto. Es reponer unos por otros. Y con más y mejores instalaciones.
-Dijo Alberto Sanz, socio crítico que aspira a desbancarle, que así estarían como en una "una lata de sardinas".
-A este señor le podría calificar de muchas cosas, pero sólo diré que es un irresponsable total.
-Pide una rebaja de cuotas a jubilados y socios de más de 35 años de antigüedad.
-Yo le lanzo una pregunta: ¿sabe cuántos socios hay en esta situación? ¿Cuantificó cuánto supondría eso al Centro Asturiano? Lo que propone es de una gravedad tremenda. Merma ingresos por todos los lados. ¿Está el Centro en situación de suprimir 600.000 euros de cuotas de personas jubilados con más de 35 años de antigüedad? No es viable bajo ningún concepto. Bueno sí, sería viable: pero habría que cobrar el 30 por ciento más a otros. Esto es gestión pura y dura. Tu gestionas y te endeudas en función de unos recursos disponibles. Si pierdes socios hay que recuperarlos. ¿En qué se basa el señor Sanz para decir que habrá menos comodidad?
-¿En qué?
-En que es un irresponsable. Él quiere bajar las cuotas sin saber la repercusión. No sabe los recursos, los compromisos de pago. Quien lo está pasando mal es la gente joven que está en el paro. Los jubilados cobran siempre. Sanz debería haber venido a la Asamblea General y decir allí lo que tuviera que decir.
-Él asegura que representa a un "grupo de socios".
-No representa a nadie. Sólo a sí mismo. Si representara a alguien vendría a la Asamblea.
-¿Hay división en el Centro Asturiano?
-No rotundo. Es una irresponsabilidad de Sanz dar a entender eso. Hace daño al Centro. Los estatutos, de hecho, contemplan la posibilidad de abrirle un expediente y será un tema que se tratará en la Junta Directiva. Él tiene que venir a las asambleas y decir las cosas que quiera. Para conocer el Centro hay que vivirlo todos los días, no aparecer de cuando en cuando.
-¿No le gusta que haya alternativas a usted de cara a las elecciones?
-Al contrario. Yo siempre dije que quiero que en el Centro haya alternativas. Pero que sean alternativas válidas y serias. Y la de este señor no la es. Gestionar el Centro no es un juego aunque algún irresponsable crea que se puede hacer. Es un tema muy serio del que dependen muchas familias. Es una empresa compleja que hay que gestionar bien. Este señor no está preparado. Y lo digo rotundamente.
-¿Se siente respaldado?
-Totalmente. En las últimas elecciones, este señor se presentó y no sacó ni el 20 por ciento de los votos. Y si vuelve a presentarse se lo volverán a decir. Él puede criticar las obras de las piscinas, pero que no se olvide que yo me presenté en 2011 con un proyecto que eran las piscinas. Y yo estoy cumpliendo lo que prometí. Inevitablemente tenemos que acudir a la financiación, porque no tenemos recursos. Él da a entender que en el Centro pasa algo raro y nada más lejos de la realidad. Nunca hubo tanta unión en el Centro como la hay ahora.
-¿Cómo van las obras de las piscinas?
-Estarán habilitadas a finales del mes de junio. Y para octubre o noviembre esperamos que el complejo entero esté funcionado.
-¿Hay menos árboles en la finca?
-Hay muchos más de los que nos encontramos. Quitamos algunos por motivos de seguridad, pero todos fueron transplantados. Hay casi 300 árboles y casi mil setos de tres metros de altura. También 2.000 setos bajos.
-¿Por qué quiere repetir como presidente del Centro?
-Me encuentro bien y me quedan cosas sin hacer. Y porque me lo piden los socios.
