Bajo el supuesto de que "vivimos engañados y sólo nos llega el 15 o 20 por ciento de las tramas políticas que se cuecen en el mundo", Alberto Novo presentó ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA su novela "La tormenta escocesa", que se puede "encasillar dentro de la novela negra, como una trama policial en un ámbito real: el proceso independentista escocés, con pasajes en Edimburgo Glasgow, Londres, Italia y España", según describió Antonio Virgili, director general de la RTPA. Sin embargo, el autor precisó que "no es una novela negra, sino que me baso en la actualidad y en complots e intrigas políticas entre estados". Virgili presentó al autor como "profundamente oviedista, que llama a uno de sus personajes Stan Collymore, peculiar jugador que tuvo el Real Oviedo". En cuanto al ritmo del libro, lo calificó de "trepidante, con estilo directo, que rehuye la pedantería y trufado de citas gastronómicas". Virgili también entrevió "un estilo influido por el cine, como si la novela estuviera describiendo la película que el autor tiene en la cabeza". En efecto, Novo se confesó "enamorado del cine clásico", y agregó: "la última película que vi fue 'El coloso en llamas'".

Respecto a las influencias literarias, Alberto Novo habló de Paul Sussman, autor británico de novelas como "El enigma de Cambises", "He seguido su estilo porque es una literatura ágil y viva, con capítulos cortos en los que se entremezclan historias", explicó Novo, quien agregó que de escribir novelas "no comes y ni siquiera meriendas".