No era un experimento de la clase de Química que se fue de las manos, sino una gamberrada que terminó con el desalojo de toda la comunidad educativa de un instituto de la ciudad tras desatarse un incendio en los baños del centro. Según ha podido confirmar este periódico, se trata de un fuego provocado por un alumno que, tras reconocer los hechos, ha sido expedientado con una falta "muy grave", lo que conlleva varios días de expulsión. Lo más curioso del asunto es que el incendio -que no provocó llamas, sino una masa ingente de humo- fue causado con "tipex", la popular tinta correctora.

Aunque se acaba de formalizar una denuncia en dependencias policiales para esclarecer los hechos, en el centro educativo tienen claro el desarrollo de los acontecimientos. Fuentes consultadas por este periódico en la dirección del Instituto de Educación Secundaria restaron ayer importancia a los hechos y rebajaron el suceso a "una chiquillada" y "una gracieta".

Según ha trascendido, los hechos tuvieron lugar el martes de la semana pasada, cuando el alumno se introdujo en uno de los baños del instituto a media mañana e incendió el plástico donde se colocan los rollos de papel higiénico. Lo hizo ayudándose de "tipex" y un mechero. Aunque el incidente no causó llamas, el humo se propagó rápidamente por la zona e hizo saltar la alarma de incendios. Todos los edificios del instituto fueron desalojados de inmediato y entre la comunidad escolar no hubo que lamentar ningún herido por inhalación de humo. Hasta el lugar se desplazaron varias dotaciones del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS), que se ocuparon de extinguir el incendio, ventilar las instalaciones y devolver la seguridad al centro educativo.

"No fue fortuito, fue provocado y el alumno ha reconocido los hechos. Su familia está de acuerdo en pagar la factura de los daños, que no será muy elevada. No hay demasiados daños materiales, tan solo habrá que pintar las paredes del baño", explicaron las mismas fuentes consultadas en la dirección del centro educativo. También descartaron que la acción se trate de algún tipo de "vendetta" contra el instituto o el profesorado.

El chico sospechoso de haber provocado el fuego fue interrogado por los responsables del centro, y el joven no tardó en confesar su fechoría. Ha sido expedientado con una falta "muy grave" contra el código de conducta del centro escolar, lo que le mantendrá alejado del instituto durante unos días.