La nueva zona azul que regirá los aparcamientos regulados de la ciudad comenzó a funcionar hoy con el estreno de los nuevos parquímetros que, desde hace semanas, permanecen en las calles envueltos en un plástico. Las 142 nuevas máquinas repartidas por el municipio obligarán al usuario a introducir la matrícula de su vehículo antes de sacar el tique, y les permitirá realizar el pago con tarjeta de crédito o débito. El abono con monedas, como hasta ahora, también estará permitido. Las tarifas actuales (1,70 euros de máximo por dos horas y 0,15 céntimos de mínimo), sin embargo, no variarán hasta que se apruebe la nueva ordenanza, paralizada desde la llegada al poder del nuevo gobierno del tripartito (PSOE, Somos e Izquierda Unida).

Un grupo de operarios comenzó esta mañana a recoger la recaudación de los antiguos parquímetros, que a partir de hoy dejarán de servir. El Ayuntamiento ya tiene lista una campaña de información detallada al ciudadano, además de una página web, que tendrá por objetivo explicar con detalles el sistema de las nuevas máquinas. Hoy comenzarán a funcionar la mayoría, aunque todas quedarán instalados de manera definitiva el sábado. "No se trata de un sistema para recaudar más sino para estar más cerca de la gente", aseguraron ayer a este diario fuentes municipales.

Estos nuevos parquímetros inteligentes, que llevan funcionando varios meses en otras ciudades como Madrid, permitirá también al usuario pagar a través del teléfono móvil, aunque esta opción todavía no estará vigente a partir de hoy. "Está previsto, pero se estudiará", afirman las mismas fuentes. El sistema obliga a partir de hoy al usuario a introducir la matrícula antes de iniciar el proceso de pago, una medida que permitirá tener más control sobre los vehículos y que facilitarán ventajas futuras, como la posibilidad de que un mensaje de móvil avise al usuario de la duración que le queda al tique o de que se ha avisado a la grúa.

Sin embargo, todo eso se irá implementando con el paso de los días. Lo que no cambiará a corto plazo serán las tarifas. Los precios vigentes se mantendrán igual hasta que no se saque adelante la nueva ordenanza, diseñada por el anterior gobierno del PP y criticada en su día por los tres partidos que hoy conforman el gobierno de la ciudad. Esta regulación, que parece será revisada por la nueva corporación, contempla en su versión original tarifas más baratas (1,60 euros) y ofrece una hora de aparcamiento gratis de los residentes (de nueve a diez de la mañana). A cambio, permitirá a los controladores de la ORA poner multas, una competencia que no tenían hasta ahora. Cada uno iría equipado con un sistema digital a través del cual podría hacer fotografías de la infracción y poner de forma inmediata la denuncia. Con la nueva ordenanza, además, los ciudadanos también podrían poner multas, haciendo una fotografía y avisando al a policía.

La nueva gestión de la ORA fue adjudicada hace meses a la empresa "Estacionamientos y Servicios".