José Ramón Fernández y Consuelo Colmenero son un matrimonio avilesino, aunque Colmenero es ovetense y de la Losa. Admiten que "les gusta mucho la ciudad" y que suelen venir a esta calle siempre que pueden a "dar un paseo". Consternado por la noticia del traslado de barracas a la zona, Colmenero comentó: "No deberían traerlas aquí. No me gusta nada esa idea". Por su parte, Fernández tampoco parecía muy convencido por el traslado: "Este tipo de actos ensucian las calle, y esta es una de las más bonitas de la ciudad, así que rechazo totalmente las barracas aquí".

Enma Ovejero, también vive en la céntrica calle. Recordando años anteriores, cuando las barracas estaban instaladas en su calle, aseguró: "Cuando nos ponían las atracciones infantiles aquí, a todos nos causaba un trastorno muy grande. Esperemos que este año esté todo un poco más controlado". Y es que San Mateo es en septiembre. Ovejero lo explica de esta manera: "Hay que aclarar que son unas fechas complicadas. El verano ya se ha terminado, los niños ya han empezado al colegio, nosotros a trabajar. Es un tema complicado", afirmó. Aunque también es consciente de que la ubicación de su calle es bastante adecuada para este tipo de eventos: "Puedo llegar a entender que pongan aquí las barracas. Para los que vivimos aquí es un problema, pero bueno, esto tampoco es un sin vivir", aseveró Ovejero.

Pero claro, la cosa cambia cuando no se vive en la Losa o no se tiene un familiar o amigo por la zona. Los vecinos de los barrios cercanos a la calle "están encantados" con el traslado de las barracas de San Mateo a "su lugar de origen". Se escuchaban afirmaciones como "ya era hora de que las trajeran aquí" o "que alegría que hayan vuelto a juntar todas las barracas en un mismo recinto". Enrique Arango vive en la Argañosa. Se muestra encantado con la noticia del traslado de las barracas. "Ya era hora de que volvieran a la Losa. Están más cerca del centro y todas juntas", dijo. Y claro, los ruidos no suponen ningún inconveniente para Arango: "Vivo lo suficientemente lejos como para que no me lleguen los ruidos. En eso tengo suerte", comentó. En la misma línea se encuentra Javier Braña, residente en la zona centro. Entusiasmado por el traslado de las atracciones infantiles al centro de la ciudad, afirmó: "Estoy encantado. Yo vivo aquí al lado y la verdad es que le dan mucho más ambiente al barrio". Además, añadió: "Me acuerdo cuando estaban instaladas aquí, no sé por qué se las llevaron, pero la vida que le daba esto a la Losa es innegable". Marisol González estaba dando un paseo por la Losa. Cuando se enteró del traslado de las barracas a esta céntrica calle, comentó: "Es muy buen sitio, la verdad. Mejor que estén todos aquí a que haya unos en la Ería y otros en La Corredoria. Yo prefiero que estén todos en un mismo sitio".

En cambio, Laura Suárez es partidaria de que se establezcan horarios para ocasionar la menor molestia posible a los vecinos: "Yo no vivo por la zona, pero en el caso de que fuera así, no me molestaría si pusieran unos horarios asequibles para que los residentes de por aquí pusieran dormir sin problemas", terció Suárez. Además, recordando el emplazamiento de esta céntrica calle, añadió: "A mi juicio, no podía haber una calle mejor que esta para este evento. Ofrece muchísimas posibilidades". Por su parte, Mindi García, vecina de la zona oeste de la ciudad, comentó que el traslado de las atracciones infantiles a la Losa es "una buena noticia para toda la ciudad", ya que como según aseguró: "Pasan muchos más niños por la zona. Le dan mucho más ambiente al barrio".

Ya en el año 2010 se tuvieron que llevar estas barracas mateínas de la calle porque "molestaban" a los vecinos. Por aquel entonces, no había tantas restricciones como parece que habrá este año. Los fines de semana las barracas se cerraban mucho más tarde de las 23 horas, por lo que algunos residentes de la calle comentaron que "no podían dormir hasta las cinco de la mañana". Este año, se incluyen una serie de matices que puede que beneficien en cierta medida el descanso de los vecinos que viven en las inmediaciones de la Losa.