Carta abierta al Sr. Sánchez Ramos, concejal de Cultura del Excelentísimo Ayuntamiento de Oviedo.
Estimado Roberto,
triste, muy triste la jornada vivida ayer en Colloto... Las noticias que estamos leyendo estos días en los medios de comunicación nos están causando una tristeza y un desasosiego a los trabajadores de Asturbega, que necesitamos compartir contigo.
Los más de cincuenta trabajadores de Coca-Cola en Asturias necesitamos respuestas. ¿Por qué?, es nuestra pregunta, Roberto. ¿Por qué quieren dejarnos sin trabajo? ¿No hemos sufrido ya bastante? ¿No hemos pasado ya por la peor de las situaciones viendo nuestro trabajo venirse abajo? ¿Viviendo la marcha de más que compañeros, amigos? ¿Luchando por mantener lo que queda de aquella torre que construimos? Lejos de recibir algún apoyo, lo único que encontramos son piedras en el camino.
La pequeña piña que ahora queda en Asturbega la formamos trabajadores de perfil variopinto, diferente edad, sexo, afinidad política y condición social... Pero sin embargo, todos estamos unidos ante lo que nos parece una injusticia sin precedentes en la historia de esta región. A lo que habría que añadir el disgusto que nos están causado tus declaraciones como concejal del que, muy posiblemente, será nuestro ayuntamiento en un futuro próximo y como máximo responsable también del área de Cultura y Festejos. No esperábamos este trato, ni mucho menos lo merecemos. Por ello, queremos trasladarte nuestro pesar: nos sentimos incomprendidos y despreciados. Lejos de sentirnos amparados por las instituciones, estamos siendo castigados por ellas.
La realidad de Asturbega ha cambiado, hemos sido las primeras víctimas de ello, así que, por favor, dejad de castigarnos ya. Esa realidad tuvo que cambiar efectivamente para adaptarse a las necesidades del siglo XXI, aunque ello supusiese tomar medidas tan drásticas, pero era la única manera de que pudiese sobrevivir lo que tanto esfuerzo nos habla constado levantar. Ni las comunicaciones son las de hace 50 años, ni los hábitos de consumo se asemejan a los del año 61, cuando comenzó a funcionar la embotelladora de Coca-Cola en Colloto. También nosotros queremos que se cumpla la sentencia del Supremo en todos sus términos y nada nos gustaría más que esta fábrica volviera a abrir sus puertas y todo volviera a ser como antes, pero ni la sociedad es la misma, ni las necesidades de la región se parecen a las de entonces.
Hemos perdido mucho, y sabemos que eres consciente de ello, pero no hace falta que nos lo recuerden a diario. Recordamos cada día a cada uno de los compañeros, amigos, que se han ido. Ya es bastante duro y no nos dejáis pasar página. Necesitamos que dejéis de meter el dedo en esta llaga y que nuestra herida cicatrice. No nos lo estáis poniendo nada fácil.
Nos siguen asaltando las dudas. ¿Por qué recibimos este trato nosotros que tanto hemos hecho por Asturias? Que esta compañía era todo un símbolo lo sabemos bien quienes aquí trabajamos, quienes hemos pasado más de la mitad de nuestras vidas en Colloto, sabemos que esta empresa a lo largo de más de 50 años ha sido espejo de otras muchas empresas de la región. Una empresa, que ha dado de beber a los asturianos, y de comer a más de 500 familias en este medio siglo de vida, una empresa y que ha contado con más 1.500 empresas auxiliares como proveedores.
Pero nuestra implicación con Asturias ha ido mucho más allá, como todo el mundo sabe. Hemos estado presentes en las carreras deportivas, en las fiestas patronales, en las vueltas ciclistas, en los colegios... Hemos apoyado a asociaciones y hemos participado en todo tipo de eventos, que muchas veces, gracias a una marca como la nuestra, han hecho posibles, pero ahora parece que nada de eso ha pasado, cuando hemos sido ejemplo y motor para esta región. Una tercera parte de la población asturiana ha conocido las instalaciones de Asturbega, en su mayoría niños, que generación tras generación se han acercado a visitar la fábrica, una fábrica que forma parte de su historia, la de Asturias. ¿Cómo no van a sentir la pérdida? Ahora pretendemos olvidarnos de todo eso y borrar de un plumazo el trabajo de tantos años.
Desde 2008 y antes que nosotros, han vivido este duro proceso trabajadores de otras muchas empresas grandes y pequeñas que en ningún caso han recibido el duro escarmiento que estamos padeciendo nosotros, demonizando y castigando a los trabajadores que aún mantenemos nuestro puesto de trabajo y que nos esforzamos día a día para que esta empresa salga adelante, por nuestro bien evidentemente, pero también por el de la región.
No obstante, no todo son piedras y nos gustaría destacar el apoyo cariñoso que estamos recibiendo de numerosos clubes deportivos, centros escolares, asociaciones, organismos e instituciones de todo tipo, y que no te imaginas Roberto, de qué manera estamos agradeciendo. No tenemos ninguna duda de que las cosas se han hecho muy bien aquí, y es en momentos como este, cuando uno se da, cuenta, aunque no todo el mundo quiera reconocerlo.
Un saludo Roberto, simplemente nos gustaba compartir contigo nuestro disgusto estos días.
Ramón Menéndez Díaz firma esta carta, remitida al edil del Ayuntamiento de Oviedo Roberto Sánchez Ramos, junto a otros veinticuatro trabajadores de la planta de Coca-Cola en Colloto.
