Sus señorías les llaman "miniplenos" y son reuniones informales en las que los 14 concejales de los tres grupos del tripartito (6 de Somos, 5 del PSOE y 3 de IU) quedan para contarse unos a otros qué tal va la cosa, cómo sigue esa ardua tarea de gobernar Oviedo. Son citas que no se anuncian, como la del Prida pero en el Ayuntamiento. Porque la transparencia, no crean, tiene sus límites.
El pasado lunes hubo un minipleno. El segundo de la historia del tripartito. Había que dar cuenta al Alcalde y a su evidente moreno de los asuntos candentes de la ciudad, que uno llega de las vacaciones y quiere saber. Normal. La cita estaba prevista para las cinco de la tarde, pero empezó tarde porque las hay tan poco puntuales que se dice, se comenta, que ya empieza a molestar. No estuvieron todos los que son, y casi que menos mal: si llega a estar Rosón, o Rivi, o los 14 a la vez, la cita no dura tres horas, como duró. No. Los ediles, directamente, duermen allí.
Se habló tanto que no se decidió nada. La Memoria Histórica acaparó la reunión. Como IU tocó el asunto, Taboada tuvo que confesar que había organizado una reunión con las asociaciones. Nada de las sestaferias. Nada del bando del concejal. Nada de Coca-cola. Algo del Reconquista y poco más. Tampoco se trataba de eso, en realidad, porque para organizar lo de fuera primero hay que organizar lo de dentro. Así que había bastante de qué hablar.
A ver: se anunció que ya hay nueva responsable de prensa de la Alcaldía. Y se puso encima de la mesa el documento con los códigos internos de conducta, porque cuando hay tres jefes se necesitan normas y coordinación. Una de ellas es la de salir a informar sobre las decisiones que toma el tripartito, cada viernes, en junta de gobierno. ¿Pero quién? El Alcalde propuso que fuera él quien diera la rueda de prensa con el concejal de turno, según el tema. Pero la vicealcaldesa eso no lo ve y planteó que salieran siempre representantes de los tres grupos, que para eso es un tripartito y aquí nadie es más importante que nadie. Sólo faltaría. Total, que el documento no se firmó. Quizá en el próximo minipleno, calma.
