El único protocolo claro y pautado que existe en el Ayuntamiento de Oviedo sobre el uso del balcón y la fachada de la casa consistorial es el que se refiere a los ediles y al orden que deben seguir las banderas del Ayuntamiento (de izquierda a derecha: bandera de Oviedo, de España, de Asturias y de Europa). "El resto queda a criterio de la Corporación", explicaba ayer Enrique Fernández, jefe de protocolo del Ayuntamiento ovetense entre 1991 y 2009. En "el resto" al que se refiere Fernández se incluye el uso del balcón. Con el tripartito este uso ya ha generado alguna fricción interna, como la intención de Somos e IU de cederlo a los portavoces de las marchas por la dignidad. En los últimos meses sí que el balcón se ha usado para otras cuestiones. La primera, para la celebración de la toma de posesión de Wenceslao López como alcalde. Luego llegaría la colocación de la bandera por el Día del Orgullo Gay o el pregón de San Mateo. La fachada también luce una pancarta contra la violencia machista que incluye un contador de las víctimas en lo que va de año.