El tripartito no quiere ceder el balcón del Ayuntamiento para que la cofradía de los Estudiantes lean la sentencia de Poncio Pilatos que condenó a la cruz a Cristo y a cantar una saeta durante la procesión de la "madrugá" de Semana Santa, que se celebra entre la noche del Jueves y el Viernes Santo. El alcalde, Wenceslao López (PSOE), se puso en contacto ayer con sus socios de gobierno (Somos e IU), para recabar su opinión sobre la cesión del balcón consistorial. Las dos formaciones tienen clara su postura: "No a la cesión".

Esta polémica se une a la decisión del tripartito de no permitir a bomberos y policías locales participar como escoltas dentro de las procesiones alegando "motivos económicos". Según los datos que maneja el gobierno local, las tres escoltas con traje de gala que realiza la policía cuestan un total de 1.815 euros. La única escolta que realizan los bomberos es de unos 500 euros.

Sobre esta polémica y la de la cesión del balcón consistorial para cantar saetas, los podemistas, a través del edil Rubén Rosón, se limitan únicamente a esgrimir "la laicidad del Estado". En IU, a través de su portavoz, Cristina Pontón, asumen el argumento del laicismo pero van más allá. "Hasta ahora ha sido anormal la implicación de la administración a lo religioso más allá del apoyo como actividad turística y cultural", apunta la edil de la coalición en referencia a la cesión del balcón y a la prohibición de la presencia de agentes. Y añadió: "El nacionalcatolicismo de Gabino de Lorenzo es un tiempo pasado que jamás será mejor".

Desde las filas socialistas Ana Rivas considera que la cuestión de las saetas en el balcón del Ayuntamiento "no es prioritario" y que "se debatirá" en el seno del tripartito. Además, señaló que la Junta de Hermandades tiene un local en la plaza del Ayuntamiento desde donde podría cantarse la saeta. También desde la parte socialista del tripartito municipal, Ricardo Fernández, concejal del área de Seguridad Ciudadana quiso aclarar la polémica de la prohibición sobre la participación de policías y bomberos locales en los pasos de Semana Santa. "Respetamos todas las creencias religiosas. Pero el uniforme (de policías y bomberos) es público y no tiene color político ni religioso", dijo Fernández.

El edil socialista garantiza el operativo de seguridad que vela para evitar que se produzcan problemas de orden público durante las procesiones, y que tiene un coste previsto de 17.799,02 euros. Al mismo tiempo, bomberos y policías locales mostraron su disposición a participar sin cobrar horas extras en las procesiones como escoltas, lo que también rechaza el tripartito.