Los conductores que circulan por la ciudad fueron más irresponsables en 2015 que el año anterior a la hora de acceder a alguna de las 58 calles peatonales "blindadas" en Oviedo a los vehículos sin autorización. Las cámaras instaladas en 2011 por el Ayuntamiento detectaron el año pasado 7.900 infractores, lo que supone un aumento de mil sanciones de este tipo con respecto al ejercicio anterior. Aunque en los últimos años la medida estaba haciendo efecto y el número de sanciones se iba reduciendo progresivamente, en 2015 repuntaron las denuncias por acceder a las calles peatonales sin autorización. Con todo, los datos están muy alejados de los primeros meses de funcionamiento de estos sistemas, con registros de hasta 10.000 infractores en periodos de cuatro meses.
El Grupo municipal Socialista, ahora al frente del gobierno municipal, denunció durante el anterior mandato ante el Defensor del Pueblo la instalación de este tipo de dispositivos, al considerar que vulneran el derecho a la intimidad. El PSOE defendió entonces que este tipo de multas eran ilegales, al no contar con una ordenanza ni un decreto municipal que las avalen. El Defensor del Pueblo requirió una serie de documentación, pero finalmente archivó la queja.
Velocidad
También aumentaron durante el último año, aunque en una proporción mucho menor, las multas por exceso de velocidad detectadas por el radar móvil que va rotando por los trece cajetines distribuidos en diferentes calles de la ciudad. En total, la Policía Local tramitó el año pasado 3.730 denuncias de este tipo, mientras que en 2014 el número de infracciones fue de 3.652. En este caso, las multas van desde los 100 a los 600 euros, dependiendo de la velocidad. Esta infracción también puede implicar la pérdida de entre 2 y 6 puntos del carné de conducir.
