Los vigilantes del centro de responsabilidad penal de menores de Sograndio aseguran que están sufriendo "las represalias" de la dirección de la institución por haber secundado una huelga contra la empresa adjudicataria del servicio, Alcor Seguridad, para reclamarle la paga extraordinaria de marzo y varias deudas, además de "discrepar de actuaciones arbitrarias e irregularidades en el centro".
La Asociación de Vigilantes de Seguridad Privada de Asturias (Avispa) califica la situación de "caza de brujas" y denuncia a través de un comunicado que la dirección del centro de menores ha abierto expedientes sancionadores por motivos "tan ridículos y disparatados como tomarse un café o mover una silla". La dirección también ha denunciado en la Fiscalía de Menores del Principado al personal por "interrumpir el normal funcionamiento de las instalaciones durante la huelga".
Avispa asegura que la responsable de la empresa Alcor, Belén González, vigila diariamente al personal de seguridad "mediante el circuito de cámaras en busca de pruebas que les incriminen para ser castigados laboralmente". Además, según la Asociación de Vigilantes de Seguridad Privada, "por orden de la dirección, se están destinando trabajadores adscritos al servicio de seguridad y vigilancia a tareas generales de mantenimiento y limpieza".
