-Una novela a pie de Camino de Santiago.

-El Camino da para mucho. El Camino une y cambia, es motor de transformación y conocimiento. Yo viví la experiencia y ahora he creado a unos personajes y los he puesto a caminar.

"El Códice de Clara Rosenberg" es la novela de la escritora y periodista asturiana (Trevías, Valdés) Magdalena del Amo, que será presentada mañana en Libroviedo (ocho y media de la tarde), presentada por el periodista de LA NUEVA ESPAÑA Javier Neira. Novela larga, setecientas páginas, pero es que el escenario geográfico en el que se desenvuelve también es amplio, de Roncesvalles a Santiago, unos 790 kilómetros en los que pasa casi de todo.

-¿Quién es Clara Rosenberg?

-Es periodista, mujer de carácter, de las de rompe y rasga. Llevaba años casada con su marido y de pronto descubre una infidelidad. Necesita rehacer su vida y decide llevar a cabo un proyecto que estaba ahí, pendiente: hacer el Camino de Santiago completo.

-¿Sola?

-Con unos amigos, gente con muy distinta sensibilidad. Y, por una serie de circunstancias, con su marido, del que está segura que se va a divorciar. Y hasta aparece un antiguo amor. Clara se encuentra de pronto en medio de la ruta rodeada de dos hombres que pretenden reconquistarla.

-¿Una novela de amor?

-De amor, de desamor, de misterio... Hay una muerte e interviene la Policía. No hay en ella escenarios ficticios, así que "El Códice" tiene también algo de guía de viaje, aunque no sea un libro para llevar bajo el brazo.

-¿Cuál es su experiencia andarina?

-Hice la Ruta desde Roncesvalles a Compostela, y muchas otras etapas locales, sobre todo en compañía de amigos americanos. Soy una enamorada del Camino, pero es que además viví tres años en Santiago y siempre mantuve mucha relación con los peregrinos. Trabajaba en Popular TV Galicia y en la programación el Camino estaba muy presente.

-Y el grupo peregrino de su novela, ¿cómo definirlo?

-Cada cual tiene sus creencias. Hay quien está convencido de que al final se encontrará con los restos del apóstol Santiago. A otros les da exactamente lo mismo. Hay quien finaliza el Camino en la catedral y hay quien acaba en Finisterre, que es también una forma de renacer, más pagana. En general es un grupo de gente interesada por las cosas y capaz de conversar inteligentemente sobre la vida.

-¿Y el códice del que habla el título?

-Es algo así como el Códice Calixtino de la protagonista, la forma en que ella concibe el Camino de Santiago. Clara trata de apartarse de muchos de los peregrinos que entran en el Camino, pero el Camino no entra en ellos. Toda esa gente que anda y recorre kilómetros pero que no disfruta de los campos de girasoles, de cada monumento, de cada piedra y cada árbol. Hay quien considera la meta como lo único importante, y se pierden muchas cosas, entre ellas compartir experiencia y bocadillo con peregrinos con los que ni siquiera compartes idioma. Me parece preferible hacer el Camino por etapas dilatadas en el tiempo y disfrutando de verdad que hacerlo de una sola vez a base de corre corre.

-¿Aparece Asturias en su novela?

-Hablo de Asturias. Aunque los protagonistas no pasan por aquí Clara prepara tan minuciosamente la experiencia que se conoce datos, historia y leyendas.