Carlos Ponte, que encabeza la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública de Asturias, ha abierto las comparecencias de la comisión de investigación sobre las listas de espera en la sanidad constituida en la Junta General del Principado a iniciativa de Podemos. Ponte ha explicado que "las listas de espera son un problema grave" en Asturias", que atribuye a "factores múltiples", y abogó por "un nuevo contrato social" sobre el sistema sanitario, más transparente y con mayor presencia de la ciudada​nía.

"En la Plataforma hemos recibido denuncias de pacientes por esperas de hasta dos años para una prueba y nos preguntan para qué han pagado yo a la sanidad pública si no le resuelven el problema", refirió. Las deficiencias en la pública impulsan la sanidad privada, añadió, y ha generado "una sanidad dual".

Ponte sostiene que "la eficiencia del sistema es mejorable" y que hay "problemas con la gestión de los recursos humanos". También ha advertido que "Asturias tiene el gasto hospitalario más alto del Estado".

La sanidad pública asturiana cerró el pasado mes de abril con 121.356 pacientes pendientes de una operación, una prueba diagnóstica o una primera consulta. Según los datos publicados por la Consejería de Sanidad, 18.407 asturianos aguardan una intervención quirúrgica, 68.990 una primera cita con el médico y 33.959 una exploración.

En la sesión de hoy comparecerán, además de Carlos Ponte, Adrián Arias, presidente de la Confederación de Asociaciones Vecinales de Asturias; Arturo Monteserín, de la Asociación Pensionistas de Gijón; Marciano Sánchez Bayle, portavoz de la Federación de Asociaciones de Defensa de la Sanidad Pública; y un representante de la Asociación del Defensor del Paciente de Asturias.

Desde el PSOE se ha criticado la actitud de partida de algunas de las entidades llamadas a declarar ante la citada comisión. Es el caso de la Asociación Pensionistas de Gijón, que ha enviado un correo electrónico a sus miembros en la que los invita a enviar sus "quejas" con el fin de "denunciar, con datos en la mano, cómo se quiere hacer de nuestro derecho a la salud un negocio privado". El mensaje lleva como apostilla "Juntos Podemos".