Un pollino extraviado en el Parque de Invierno. Este es el último episodio protagonizado por un animal en la zona urbana en el que ha tenido que intervenir la Policía Local de Oviedo, que la semana pasada monteó un jabalí desde Villa Magdalena, por todo el centro, hasta el Naranco. La alarma del burro la dieron, el pasado lunes por la noche, los vecinos del entorno de San Lázaro, que se encontraron al animal comiéndose sus setos. A alguien se le ocurrió trasladar al asno de lugar y amarrarlo, como solución transitoria, a la escultura de "La vaca biológica", obra del artista asturiano Cuco Suárez, instalada en el Parque de Invierno.

Los usuarios de la zona, muy transitada por vecinos y deportistas, alertaron de nuevo a la centralita del 092 de la Policía Local y una patrulla se desplazó con el lector de chip para averiguar si el burro tenía dueño. La investigación dio sus frutos. Los agentes enviaron los datos a la Consejería de Medio Ambiente, que a su vez trató de comunicar vía telefónica con el propietario del animal. Según informaron fuentes policiales a este periódico, se trata de un vecino de Oviedo que aseguró que el burro se le había escapado de una finca y que en cuanto pudiese se acercaría a recogerlo.

No obstante, el animal permaneció ayer durante toda la mañana junto a "La vaca ecológica" de Cuco Suárez, en una escena que algún viandante comparó con "el portal de Belén". Finalmente, según informaron las mismas fuentes, el propietario se hizo cargo del animal y los agentes levantaron acta de lo sucedido.

No es la primera vez que avisan a la Policía Local de la presencia de burros en la ciudad. Hace meses, un vecino ató un asno a una farola junto a las torres de Pando mientras realizaba unas gestiones. Era de noche y la presencia del animal también causó revuelo en la zona. Mientras, los vecinos de Ciudad Naranco aseguran que el jabalí de Villa Magdalena u otro que se le parece, está realizando incursiones nocturnas en el barrio.