La Policía Local busca a un hombre "de unos 40 años y con pendientes" que el sábado compró bebidas alcohólicas a menores de edad a cambio de dinero en un establecimiento de la plaza Daoíz y Velarde, en el entorno del Fontán. Un testigo denunció los hechos el sábado por la tarde, cuando, siempre según su versión, hacia las 20.15 horas vio cómo un grupo de chavales pagaban a un adulto que acababa de salir de una tienda cargado de botellas y se las entregaba.
Los agentes analizan ahora las imágenes de las cámaras de vigilancia de la tienda para tratar de identificar y localizar al sospechoso. Y es que tanto el adulto como los jóvenes huyeron de la plaza Daoíz y Velarde antes de que llegase la policía.
La ley de atención integral en materia de drogas y bebidas alcohólicas que entró en vigor el año pasado prohíbe el consumo y la venta o suministro de alcohol a los menores de 18 años aunque exista consentimiento de los padres. Además, los adultos que incentiven su consumo incurren en responsabilidad. Antes de la aprobación de la ley, Asturias era la única comunidad española en la que los jóvenes podían tomarse una copa dentro de la legalidad antes de cumplir la mayoría de edad. Tanto la comunidad científica como la Fiscalía asturiana llevaban años advirtiendo de la necesidad de que El Principado retrasara la edad legal para comprar o beber alcohol.
El texto legal también impide la publicidad de bebidas alcohólicas en cualquier medio de titularidad pública, ya sea una valla, marquesina, mupis, mobiliario urbano o publicaciones. Estas limitaciones sobre la publicidad no afectan a la promoción de la sidra, que tendrá un tratamiento diferenciado. Por ejemplo, los menores podrán visitar bodegas o lagares, por razones familiares o docentes, siempre que lo hagan acompañados de mayores de edad.
