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El radar de la entrada a Oviedo por la autopista "Y" caza 37 vehículos al día

Un conductor circuló a 126 kilómetros por hora en una zona limitada a 50 junto a la iglesia de Santullano Muñoz Degraín genera 300 sanciones al mes

El radar instalado a escasos metros de la iglesia prerrománica de Santullano, en la entrada a la ciudad por la autopista "Y", figura desde hace años en los primeros puestos del ranking de los cinemómetros que más multan de toda España. Las cifras de conductores "cazados" cada mes dan buena cuenta de ello. Según los últimos datos a los que ha tenido acceso LA NUEVA ESPAÑA, cada día 37 conductores se saltan el límite de velocidad de 50 kilómetros por hora en una vía que soporta uno de los mayores flujos de tráfico de la ciudad. Sólo el pasado mes de julio fueron 1.135 los conductores sancionados por no respetar el límite de velocidad en este punto.

De todas las infracciones detectadas por la Policía Local en este acceso a Oviedo, dos fueron tramitadas por vía judicial, por un presunto delito contra la seguridad vial. Y es que uno de los conductores "cazados" por el radar hizo su entrada a la capital asturiana a una velocidad de 126 kilómetros por hora (con el coeficiente reductor aplicado) según los datos oficiales consultados por este periódico. "En la ubicación de la autopista A-66 en la entrada al centro de la ciudad es donde se detectan velocidades superiores, con varias infracciones que superan los 100 kilómetros por hora", aseguraron fuentes policiales consultadas. De este modo, la mayor velocidad detectada en lo que va de año, en concreto el pasado mes de julio, fue la de este conductor a 126 kilómetros por hora.

El área de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Oviedo dispone de un radar de velocidad que va rotando por los diferentes "cajetines" instalados en varios puntos de la ciudad. Además del mencionado en la entrada a la ciudad desde la "Y", los radares se colocan en Muñoz Degraín, Avenida de Santander, Favila y La Florida. Según las mismos informaciones facilitadas por la Policía Local, en lo que va de año el radar ha estado solamente en dos emplazamientos: Muñoz Degraín y el acceso a la ciudad desde la autopista. Así, en los primeros meses del año (en concreto hasta el 29 de marzo) el radar no estuvo operativo, porque fue enviado a pasar la revisión periódica correspondiente. Una vez superada esta prueba, el radar regresó a las calles y estuvo colocado hasta el mes de julio en la calle Muñoz Degraín. Durante este periodo el dispositivo "cazó" 12 vehículos durante 3 días en marzo, 211 vehículos durante 30 días en abril, 252 vehículos infractores en mayo, y otros 309 conductores durante los 30 días del mes de junio. A partir de esta fecha, la Policía Local decidió trasladar el dispositivo al "cajetín" de la entrada a Oviedo por la autopista, tramitándose 1.135 sanciones a lo largo del mes de julio.

Otro de los radares de la ciudad que suele acaparar mayor número de sanciones es de la Avenida de Santander. Sin embargo este año no se usó -al menos hasta el 31 de julio- al quedar inoperativo el "cajetín" después de que un conductor ebrio lo derribase en un accidente durante un fin de semana. Ahora ya ha sido repuesto y está listo para albergar de nuevo el cinemómetro.

El Ayuntamiento tenía un proyecto para ampliar el número calles controladas por radar instalando nuevos dispositivos en zonas "especialmente conflictivas" donde se registran accidentes. Uno de los barrios por los que se apostaba para instalar un radar era el de Montecerrao. Fuentes municipales consultadas por este diario han explicado que, por el momento, no se instalarán más radares.

En las cinco calles de la ciudad en las que el radar está instalado, el límite máximo de velocidad oscila entre los 30 y los 70 kilómetros por hora, y las multas establecidas por no respetar estos parámetros van desde los 100 hasta los 600 euros, dependiendo de la velocidad, según refleja la ley de Seguridad Vial. Superar la velocidad en sólo un kilómetro por hora supone una sanción de 100 euros. Cada diez kilómetros por hora de más la sanción aumenta de cien en cien euros hasta llegar al tope de los 600 euros. Las sanciones que oscilan entre los 300 y los 500 euros implican la pérdida de dos a seis puntos del carné de conducir, dependiendo de la velocidad superada. Las sanciones de 600 euros implican una pérdida de seis puntos del carné.

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