El Gastromateo alternativo del paseo del Bombé ideado por el nuevo equipo de gobierno no ha calado entre los hosteleros de la ciudad. A última hora de la mañana de ayer, a sólo unas horas de que concluya el plazo oficial de presentación de solicitudes -hoy, a la una y media-, la Sociedad Ovetense de Festejos (SOF) había registrado "cuatro o cinco proyectos", según las fuentes consultadas en la entidad. Si no se produce un aluvión de solicitudes de última hora, el proyecto podría quedar en el aire por falta de aceptación.

Las mismas fuentes de la SOF explicaron a este periódico que hasta el último momento se habían producido reuniones con representantes de las asociaciones de hostelería de la ciudad, que se habían interesado por las bases, pero que hasta el momento sólo se habían recibido un escaso número de solicitudes, a todas luces insuficiente para desarrollar el proyecto concebido.

Una de esas asociaciones es Otea, la Asociación de Hostelería y Turismo de Asturias, cuyo presidente, José Luis Álvarez Almeida, aseguró ayer en conversación con este diario que desde la asociación se estaban dando "todo tipo de facilidades" a los socios para concurrir a la convocatoria. "Hay varios interesados", indicó a unas horas del cierre del plazo. También mantuvieron reuniones con la Sociedad Ovetense de Festejos los hosteleros del Bulevar de la Sidra, muy interesados en llevar sus productos al paseo del Bombé. El presidente del colectivo, Francisco Colunga, aseguró ayer que "no hay nada decidido", pero que el proyecto, tal y como está concebido, no se adapta a sus necesidades.

Existe además otra convocatoria lanzada por la SOF cuyo plazo concluye hoy: el proyecto para instalar cuatro nuevos chiringuitos en dos nuevos emplazamientos, La Corrada del Obispo y en El Campillín. La entidad que se encarga de la gestión de los festejos de la ciudad había recibido a última hora de la mañana de ayer tres solicitudes de asociaciones para optar a un chiringuito.

El Gobierno municipal (Somos, PSOE, IU) desautorizó este año la celebración del festival Gastromateo que durante dos años consecutivos organizó Otea en el paseo de los Álamos coincidiendo con las fiestas de San Mateo. Con el objetivo de abrirlo a todos los hosteleros de la ciudad, el tripartito ideó un Gastromateo alternativo en el paseo del Bombé del Campo San Francisco. Así, decidieron que se instalarían veinte casetas que se adjudicarían por medio de una convocatoria abierta a todo el sector hostelero.

Además, también como novedad, anunciaron que se ampliaría en el casco antiguo el espacio que ocupan los chiringuitos de San Mateo, permitiendo la instalación de cuatro más, en el Campillín y la Corrada del Obispo.