La concejala de Salud y responsable primera de la perrera municipal, Mercedes González (Somos), aseguró ayer que investigará "hasta las últimas consecuencias" las denuncias sobre sacrificios de animales en la perrera municipal que ha recibido del sector animalista. Requerida a media tarde por este periódico, la edil de la formación morada no sólo confirmó la investigación abierta y la visita a las instalaciones de ayer, sino que advirtió de que se mostrará inflexible en caso de que se confirmen las denuncias. "Vamos a investigar las denuncias hasta las últimas consecuencias", insistió ayer. "Esta concejala dio órdenes expresas y claras de que no hubiera en el albergue ningún sacrificio de animales sanos", añadió. "Si estas órdenes se han incumplido", continuó, "vamos a esclarecer lo sucedido". La concejala de Somos advirtió de que la idea de "sacrificio cero" de su concejalía no ha cambiado. "Nuestra línea política es clara, y por eso mismo estamos impulsando la licitación pública de la gestión del albergue de animales por primera vez en más de veinte años". El futuro de la perrera municipal está generando muchos quebraderos de cabeza a González, que hace meses tuvo que paralizar los primeros pliegos para su adjudicación tras las quejas de los animalistas. La primera versión indignó a varias protectoras, que denunciaron que temían que el albergue de animales se acabara convirtiendo en "un horno crematorio" en el que acaben sus días las mascotas abandonadas. Los pliegos actuales obligan a subrogar a los seis empleados del servicio (tres están al borde de la jubilación) y el contrato es de un millón de euros.