La piel de los perros actúa como capa protectora frente a agentes externos, como el frío, el calor o las bacterias. Por ello, un perro sano debe tener su piel en forma.
Mantener el pelaje de su mascota en perfecto estado no es sólo una cuestión de estética también de higiene y salud.
Algunos canes, al igual que las personas, tienen una piel más sensible que otros. Estos casos se identifican con picores e inflamaciones que pueden estar provocados por alergias alimentarias o problemas ambientales. Existen algunas rutinas que se pueden llevar a cabo para conseguir que la mascota luzca un pelo sano y brillante.
Desde bien pequeño, el animal debe acostumbrarse a que le cepillen al menos tres veces a la semana. Así mantendrá el pelo más limpio y se reducirá la caída del mismo. De este modo tendrá que bañarlo con menor frecuencia y , además, podrá detectar más rápido cuando su perro tenga pulgas o cualquier otro problema en el pelaje que pueda afectar su salud.
No es necesario ni bueno bañar demasiado a los animales. Las mascotas pueden sufrir sequedad en la piel y daños en su pelaje si recibe baños con demasiada frecuencia. Una forma de mantener a su amigo limpio es usando toallitas entre cada baño.
Deben evitarse los cambios en la dieta de su perro para reducir el riesgo de provocar estimulación antigénica. Si encuentras una alimentación que va bien a su mascota, no es aconsejable cambiarla. Una dieta equilibrada ayuda a conservar la protección natural de su amigo en buenas condiciones. Los suplementos de ácidos grasos omega 3 y omega 6 que contienen los piensos caninos ayudan a mantener la piel brillante.
