Francia busca profesores de español y ha decidido cruzar la frontera y venir a reclutarlos a España. Ayer tuvieron lugar en Oviedo las primeras entrevistas de un proceso de selección que durará unos dos años y en los que tienen previsto cubrirse un millar de vacantes. El primer gobierno regional en reclutar es el de Versalles y las labores de entrevistadora las llevó a cabo María Regina Mouette. Así la conocen en Francia, a donde se fue 1963. Sus apellidos de soltera: Del Río Velasco. "Yo soy de Mieres del Camino", deslizó tras una conversación en perfecto francés que ocultaba su origen asturiano.

Explica que el proceso está cumpliendo sus expectativas. A lo largo del día se entrevistó con unos veinte candidatos con los que se mostró satisfecha. Algunos ya le habían enviado la documentación directamente a la consejería de Versalles y ayer les tuvo en frente: "Traía cuatro de Francia". El tiempo impidió que se pudieran realizar más encuentros pero Sabrina Clemente, directora de la Academia Francesa de Oviedo, aseguró que la enviada de Francia se llevará consigo todos los curriculum que cumplieron los requisitos mínimos: un nivel B2 de francés, un grado o licenciatura y contar con alguna experiencia de movilidad internacional. En total, se presentaron a través de la Alianza Francesa "más de cien candidaturas" en tan solo tres días. "El francés abre puertas", dijo Clemente, quien destacó que en Versalles, primera región francesa en número de estudiantes de Secundaria con casi medio millón, el 84% de los alumnos estudian español como segunda lengua extranjera .

Gloria Blanco se enteró "por el periódico y porque muchos de mis amigos me enviaron el enlace". Y no lo dudó. Ante Regina del Río respondió cuestiones sobre pedagogía, "me dieron un texto y me preguntaron cómo lo prepararía para trabajarlo con los alumnos" y enumeró los beneficios que tendría vivir en Francia. Y también tuvo que confirmar que podría imponer autoridad en el aula: "Me dijo que me veía muy dulce". Esta estudiante de Lenguas Modernas estuvo el año pasado de Erasmus en Francia y resaltó que si consiguiese la plaza, una vez allí, se plantearía incluso opositar para pasar de eventual a fija.

Marina Pangua, de 24 años, también participó en el proceso. Graduada en Lenguas Modernas y sus Literaturas, estudió el máster de Formación del Profesorado y vivió en París durante dos años. Sorprendida porque "viniesen desde Francia a buscar personal", relató que "me gustaría volver después a casa pero si las circunstancias me llevan a quedarme en Francia no tendría problemas en preparar unas oposiciones y quedarme". Y dejó también un deseo: "Ojalá hubiera tanta demanda de profesores en España".

El gobierno regional de Versalles estima que visitará Oviedo entre dos y tres veces al año para reclutar profesores.