La segunda tanda de oposiciones para médicos constará de cuatro especialidades: ginecología, urología, cirugía general y pediatría hospitalaria. En total, 45 plazas, según la Consejería de Sanidad del Principado. La Administración sanitaria prevé que los procesos selectivos sean convocados "a finales de este mes" y que los exámenes se desarrollen "en la primavera" de 2017.
Las cifras de este nuevo bloque de concursos-oposición son las siguientes: obstetricia y ginecología, 13 plazas de turno libre; urología, 5 puestos de turno libre; cirugía general y del aparato digestivo, 14 plazas de turno libre; y pediatría y sus áreas especificas (hospitalarias), 8 puestos de turno libre, 2 reservados a personas con discapacidad y 3 de promoción interna.
La primera tanda de convocatorias, cuya primera prueba aún no está fijada -aunque se supone que se celebrará antes de Navidad-, afecta a otras cuatro especialidades médicas que han puesto en juego 96 plazas de medicina de familia (de ellas 10 de promoción interna y 11 para personas con discapacidad), 28 de anestesiología, 19 de rayos (una de ellas para promoción interna y otra para discapacidad) y 17 de pediatría de atención primaria (de ellas, tres para promoción interna y otras tres para personas con discapacidad). En términos globales, 160 plazas a las que optan 1.330 especialistas.
Tal y como había anticipado este periódico, las oposiciones de radiodiagnóstico y anestesiología se desarrollarán según lo previsto en la convocatoria ya publicada por la Consejería de Sanidad, sin aplicarles los criterios recientemente aprobados en la Junta General del Principado gracias al voto favorable de todos los grupos, salvo el PSOE. Por consiguiente, las pruebas de esas dos disciplinas incluirán dos supuestos prácticos que serán leídos ante el tribunal de cada especialidad en sesión pública.
Los anestesistas ya habían manifestado su rechazo a este mecanismo, alegando que podía dar lugar a amiguismos y filtraciones como los registrados en las oposiciones de médicos de 2011, irregularidades que incluso llegaron al Tribunal Supremo. Otro argumento de este colectivo radica en que consideran "irrenunciable que los aspirantes de todas las especialidades opositemos en idénticas condiciones".
Ayer mismo, el Sindicato Médico de Asturias (SIMPA) y Comisiones Obreras se sumaron a esta postura. Lo hicieron a través de un comunicado público conjunto -un hecho poco usual- en el que manifiestan su apoyo a la ley aprobada en la Junta, "toda vez que entendemos que la objetividad del propio tribunal queda garantizada" al no conocer los integrantes del comité evaluador "a quién de los aspirantes corresponden los formularios de respuesta". A juicio de ambas organizaciones, "la arbitrariedad de los tribunales y los riesgos continúan" en las convocatorias de rayos y anestesia, y "parece oportuno y garantista para todos los aspirantes a plazas de facultativos especialistas tener las mismas garantías que ahora les concede la Ley 3/2016". En consecuencia, reclaman a Sanidad "que anule las convocatorias de radiodiagnóstico y anestesiología, procediendo a convocarlas al amparo de la Ley 3/2016".
La nueva regulación autonómica, que se aplicará a los procedimientos de selección de las cuatro especialidades enumeradas al inicio de esta información y a todas las que aún no están convocadas, establece que "el tipo de ejercicios planteado deberá garantizar el anonimato de las respuestas de cada aspirante, de modo que el tribunal no pueda conocer a quién pertenecen los formularios de respuesta hasta que se establezca la puntuación definitiva en el concurso-oposición de todas las personas aspirantes". Asimismo, agrega, "no se realizarán, en ningún caso, ejercicios leídos o desarrollados en presencia del tribunal ni en sesión pública".
