Asturias ya tiene su propio banco de leche materna, y de este modo se ha convertido en la novena comunidad autónoma en disponer de este recurso. Este nuevo servicio está ubicado en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), se abastece de donaciones altruistas de madres y proporcionará alimento a los bebés hospitalizados que no pueden recibirla de su propia madre y que a menudo son prematuros.

El director general de Salud Pública del Principado, Antonio Molejón, visitó ayer las instalaciones del banco, emplazado en el área de neonatología del hospital ovetense, y participó luego en una sesión científica sobre esa materia, en el mismo centro sanitario. "La leche materna humana es el mejor alimento para el recién nacido y para su desarrollo posterior, eso es más relevante en el caso de que haya una alta vulnerabilidad como en el caso de los recién nacidos prematuros o que requieren hospitalización", explicó Molejón.

En los hospitales del Principado, el 34 por ciento de los neonatos se alimenta exclusivamente con la leche de su madre durante los cuatro primeros meses de vida. Para los que no pueden hacerlo, porque su madre no puede darles de mamar, y están enfermos o aún en desarrollo -como los prematuros-, el HUCA, donde nacen cuatro de cada diez niños asturianos, ha creado este banco, atendido por dos enfermeras, una nutricionista, un auxiliar y un pediatra.

Molejón hizo un llamamiento a las madres en periodo de lactancia para que donen el excedente de leche. "No requiere ningún compromiso, es un gesto de generosidad y altruismo, que será recompensado en la salud de otros niños", señaló. Hay contraindicaciones para la donación: la leche tiene que provenir de una mujer sana y con hábitos saludables, que no fume ni consuma alcohol, que no sea portadora de VIH y cuestiones similares.

La recogida de la leche se hace en el HUCA, las madre la entregan congelada y allí se procesa, se pasteuriza y se comprueba que está en perfecto estado para su consumo.

Enrique García, coordinador del servicio de Neonatología del HUCA, explicó que los sucedáneos de la leche materna pueden causar a los bebés problemas médicos y retrasa la tolerancia a la nutrición con comida sólida. El 70 por ciento de las madres de prematuros no dispone de suficiente leche para alimentar a sus hijos.

En los últimos meses, según García, se han recibido muchas llamadas de madres interesadas en contribuir con sus donaciones y el doctor está convencido de que las mujeres asturianas van a ser solidarias con esta iniciativa.

En España hay once bancos de leche materna en funcionamiento y los últimos en abrir han sido dos en Galicia y otro en Sevilla.

En la UCI neonatal hay 12 puestos intensivos y actualmente hay ingresados 11 prematuros.