Los 780 alumnos del colegio Santa Teresa de Jesús rindieron ayer homenaje a su patrón, San Enrique, con una eucaristía. La diversión continuó a lo largo de toda la jornada pero se dividió después con actividades adaptadas a las etapas de Infantil, Primaria y Secundaria. Los más pequeños, por ejemplo, disfrutaron un año más del juego del tren de la bruja. "Hay actividades que no pueden faltar. Los propios alumnos nos las piden", destaca María Fernández, profesora de Infantil. Pero la tradición de celebrar el patrón se renueva cada año, "con cosas nuevas, divertidas y diferentes". Este año los alumnos de Primaria y Secundaria acudieron disfrazados y demostraron sus dotes artísticas. Cantaron con un "Singstar" y se divirtieron con un "mannequin challange". Además, presumieron de sus habilidades en el "Teresianas Got Talent" con el que animaron la fiesta del patrón. Pero no solo los chicos triunfaron sobre un escenario al que también saltaron los profesores. También hubo espacio para el deporte y los alumnos más veteranos se enfrentaron a un equipo formado por los más jóvenes.

Llevaban mucho tiempo esperando y lo pasaron en grande. "Los niños lo disfrutan un montón y nosotros también", destacó María Fernández. Añadió que cada año, cuando se acerca el patrón, el colegio vive en los días previos una "semana de alboroto". "Mucho antes de que llegue la fiesta ya están alborotados".

Los más pequeños se centraron en la pintura y la cocina. Primero colorearon fichas de San Enrique y participaron después en un taller de repostería. Como colofón, ellos mismos hicieron de láminas en un pintacaras.

Los profesores, además de bailar, aprovecharon la jornada para reunirse y contagiarse de la felicidad de los pupilos en una fiesta que desborda las aulas. Muchos antiguos miembros del personal docente acudieron a celebrar la fiesta de San Enrique, una tradición que se renueva cada año.