La Policía Local de Oviedo ha abierto expediente sancionador a dos menores, de dieciséis y doce años, por realizar pintadas en varias calles en el entorno de la calle Vetusta, en Fozaneldi.

Los hechos, según fuentes de la Policía Local, se produjeron el pasado domingo a las seis de la tarde. A esa hora, un vecino avisó de la presencia de los adolescentes, entretenidos en hacer pintadas por los muros del barrio.

Los agentes municipales los interceptaron cuando acaban de realizar una de ellas en la calle Alonso de Proaza. Los policías localizaron otras pintadas llevadas a cabo, presuntamente, por los mismos menores. Los chavales, según fuentes municipales, habían dejado un rastro de grafitis por las calles Vetusta, Alonso de Proaza y López del Vallado, y también habían llevado su impronta hasta el centro social de Vetusta.

Los dos menores, R. G. G. , de 16 años, y A. F. V., de 12 años, llevaban encima, en el momento en el que fueron localizados por la Policía, una mochila, en cuyo interior, además de otros objetos, los agentes encontraron un espray de pintura. La Policía Local identificó a los dos menores e informó de los hechos a sus padres y de la Fiscalía de Menores.

La ordenanza municipal vigente en el municipio de Oviedo prevé una sanción de hasta mil quinientos euros por ensuciar las paredes con grafitis. Dado que una de las pintadas se realizó en un edificio municipal -el centro social-, aumenta la gravedad del hecho. El Ayuntamiento valorará repercutir a las familias de los menores los gastos ocasionados por la limpieza de los muros y fachadas pintados.

La Concejalía de Seguridad Ciudadana solicitaba hace unos meses las colaboración ciudadana para atajar el problema de las pintadas. El pasado mes de septiembre el Cristo del Naranco amanecía cubierto de espray y en la iglesia de San Julián de los Prados la Dirección General de Patrimonio tuvo que intervenir limpiando el monumento de grafitis en tres ocasiones en el último año. La casa rectoral próxima a Santa María de Naranco y la iglesia de San Miguel de Lillo también han sido objeto de estos ataques.