La onda epidémica de la gripe baja por cuarta semana consecutiva hasta situarse en 81 casos por cien mil habitantes y abandona así el periodo de difusión epidémica. No obstante, aún continúa una circulación apreciable de virus gripales, que repuntan ligeramente esta semana.

Tras alcanzar la máxima incidencia de la temporada en la semana 52/2016, la fase de descenso ha sido un poco más rápida de lo habitual, pero se espera que aún se mantenga la actividad gripal durante algunas semanas más, aunque a niveles bajos.

En el país, la difusión de la enfermedad también desciende mayoritariamente, aunque sigue siendo epidémica en todas las comunidades, a excepción de Asturias y Canarias. La tasa global de incidencia de gripe en la semana 03/2017 se sitúa en los 195 casos por 100.000 habitantes.

Desde el inicio de la temporada, se han notificado en total 1.707 casos graves hospitalizados en toda España El mayor número se registra en el grupo de mayores de 64 años (75%) seguido del de 45 a 64 (17%). Más del 90% de los pacientes con información disponible presentaban factores de riesgo de complicaciones de gripe.

De los 1.407 pacientes pertenecientes a grupos recomendados de vacunación, el 49% no había recibido la vacuna antigripal de esta temporada. Desde su inicio, se han notificado 232 defunciones entre los casos graves que precisaron hospitalización, el 52% en mujeres. El 84% era mayor de 64 años y el 16% pertenecía al grupo de entre 45 y 64. El 95% tenía factores de riesgo, y 65 casos (el 28% de los que tenían información sobre este aspecto) habían ingresado en UCI. Entre los 210 casos susceptibles de vacunación antigripal, el 50% no había sido vacunado.

Red de médicos centinela

En Asturias, el seguimiento de casos graves hospitalizados se realiza de forma centinela únicamente entre residentes del área sanitaria IV ingresados en el HUCA. Desde el inicio de la temporada, se han registrado 94 casos graves, con una tasa de 28,4 por 100 000 habitantes. De ellos, el 30% requirió ingreso en la UCI y hay 14 fallecidos (15%).

Sanidad recuerda que la gripe es generalmente una enfermedad benigna de alta incidencia que produce síntomas respiratorios. Está causada por un virus y se contagia muy fácilmente. Se transmite de persona a persona, principalmente al hablar, toser o estornudar y por gotitas de saliva o secreciones nasales que pueden quedarse en las manos, en otras superficies o dispersas en el aire.

Los buenos hábitos ayudan a disminuir la transmisión del virus y constituyen la acción más efectiva para protegerse y proteger a los demás. Es muy importante evitar el contagio, especialmente al toser o estornudar, para lo que se recomienda:

Utilizar pañuelos de papel para taparse la boca y la nariz cuando se tosa y se estornude. Si no se dispone de pañuelo de papel, se debe toser y estornudar sobre la manga de la ropa (en el hueco del codo) para evitar contaminar las manos.

Tirar los pañuelos de papel después de utilizarlos.

Lavarse a menudo las manos con agua y jabón.

Ventilar los espacios cerrados.

Limpiar con frecuencia las superficies que se tocan con las manos como los pomos de las puertas, los interruptores, etcétera.