Los vecinos del edificio del bazar chino que ayer protagonizó un gran incendio en la Avenida de Pumarín 36 de Oviedo, mantuvieron hoy una reunión en plena calle con sus administradores con el objetivo de poder saber cuándo podrán volver a sus casas.

Según indicaron los gestores de fincas, a priori, la mayoría de los afectados podrían volver a entrar en sus domicilios a partir del próximo martes o miércoles, a expensas de los resultados que aporten la empresa que estudia los daños que sufre el edificio, y lo que es lo más importante, después de que se descarte que la estructura del bloque no está afectada y hay ningún peligro.

Tras realizar los primeros estudios, los técnicos municipales indican que no hay sospecha de que el incendio, que mantuvo ayer en vilo a toda la ciudad, haya afectado a los cimientos y soportes del edificio, pero habría que esperar a que pruebas más exhaustivas lo reafimen.

Los habitantes de las primeras plantas, las más afectadas al estar justo encima del local donde se desencadenaron las llamas, tendrán que esperar más tiempo antes de volver a ocupar sus viviendas. El problema fundamental del edificio es que no tiene agua corriente ni saneamiento.

Esta misma tarde, a partir de las 18.00 horas en el centro Social de Pumarín, el concejal de Gobierno de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Oviedo, Ricardo Fernández, mantendrá una reunión con los vecinos de los bloques afectados a fin de tratar de atender sus necesidades.