La caída de los cachés de algunos artistas, la renuncia a hacer la tercera función de cada título que compone la temporada de Zarzuela "para no prevaricar", la supresión de los Premios Líricos "porque era una fiesta privada que le costaba al Ayuntamiento 200 euros por persona" y "las mentiras del PP". Éstos son los cuatro principales argumentos que utiliza Roberto Sánchez Ramos, "Rivi" (IU), concejal de Cultura, para negar las acusaciones realizadas en este periódico por el PP, a través de la edil María Ablanedo, de que el tripartito ha recortado en casi un millón de euros el presupuesto destinado a la programación de la lírica y la música clásica desde que la izquierda alcanzó el poder.

Uno de los principales "recortes" que los conservadores afean a Cultura pasa por la desaparición del presupuesto de los 410.000 euros que el PP destinó en el verano de 2015 (año electoral) para financiar dos funciones de la ópera "Falstaff" (Verdi). "Fue una partida extraordinaria que el PP sacó a última hora para conseguir una falla electoral", señaló Sánchez Ramos. "En los últimos treinta años el Ayuntamiento no había organizado una ópera, y seguramente no lo hará en otros treinta", añadió. "Una vez quemada la falla electoral, ni Ablanedo ni el PP han vuelto a reclamar una ópera organizada por el municipio". ¿El motivo? "En Oviedo existe el consenso sobre que la temporada de ópera la tiene que organizar la Fundación Ópera. Nosotros confiamos ciegamente en su profesionalidad", prosiguió. "Lo que tiene que explicar Ablanedo es si quiere romper las buenas relaciones del Ayuntamiento con la Fundación", dijo.

El siguiente punto abordado por Sánchez Ramos fue el recorte de 100.000 euros que, según el PP, se ha hecho en los conciertos del Auditorio y en las Jornadas de Piano "Luis G. Iberni". "Está poniendo en cuestión la profesionalidad de Cosme Marina, el programador de estas jornadas, en el cual confío plenamente. Yo firmo los presupuestos que me presenta". Y enlazó afirmando que "se producen pequeños cambios en el presupuesto en función de los cachés, pero la calidad del programa es exactamente la misma a la de otros años". Como ejemplo de esto, señaló que en el último concierto de piano hubo un cambio de artista por la enfermedad del previsto (la pianista Marta Arguerich por Lucas Debargue) que supuso una reducción del caché previsto en unos 8.000 euros.

Dicho esto, Sánchez Ramos cargó contra la edil del PP que hizo la denuncia: "La ignorancia y mala fe de María Ablanedo es preocupante. Lo único que está haciendo es confundir a la ciudadanía ovetense y tomarle el pelo". E insistió en que "una concejala que lleva veintidós meses en el Ayuntamiento mienta tan pronto demuestra mucha ignorancia. Es un hipoteca para su credibilidad".

La temporada de zarzuela también es objeto de polémica. El PP afirma que se han recortado 200.000 euros entre 2016 y 2017. El concejal lo justifica tirando de sus números. "La zarzuela nunca llena el Campoamor. La media de público en las dos últimas funciones ("Las golondrinas") fue de 838 personas, por lo que una tercera función no tiene sentido", analizó. "De acuerdo con Cosme Marina se decidió eliminar la tercera función de los cinco títulos de la zarzuela", añadió. Porque mantenerla" sería prevaricar porque habría que regalar entradas para que fuera gente, que es lo que estuvo haciendo el PP".

El listado de los recortes concluye con los 260.000 euros que costaban los Premios Líricos, ya disueltos. "Eran una fiesta privada a la que sólo se podía asistir con invitación. Cada persona que iba a la gala en el Campoamor le costaba al Ayuntamiento 200 euros", dijo para abundar: "La leyes hechas por el gobierno del PP impiden sustentar un fundación ficticia subvencionada al 95 por ciento por el Ayuntamiento". El dinero ahorrado, según el edil, se ha invertido en mejorar las instalaciones de los teatros municipales o en llevar a cultura a los barrios. "Hubo que comprar una pantalla nueva para el Campoamor porque un concejal del PP llevó la que había a Cogersa para que la quemaran. No querían que la gente sencilla pudiera entrar en el Campoamor a ver cine", sentenció.