El escudo de la Universidad de Oviedo no volverá a lucir en la fachada de Argüelles, 19 cuando el hueco y los andamios que hoy cubren el solar den paso a un edificio de viviendas. El Ayuntamiento de Oviedo acaba de aprobar que se dé luz verde a los actuales propietarios del solar para edificar sin necesidad de reconstruir la fachada original.

La decisión del Ayuntamiento llega después de recibir un informe favorable de los servicios regionales de Patrimonio para levantar la exigencia de reconstrucción de la fachada original del edificio, cuyo interior se desplomó en 2011. Tras aquel accidente, cuando el edificio era propiedad municipal, la seguridad de la estructura obligó a derribar la fachada, aunque entonces se explicó que al tratarse de un edificio catalogado habría que volver a reconstruir todo el frente del inmueble, en ladrillo rojo y con el escudo de la Universidad rematando una de las terrazas de los pisos superiores.

La permisividad ante la exigencia de mantener la fachada original siempre estuvo presente en el proyecto de reconstrucción del edificio de Argüelles, 19, y esta no es la primera vez que el Ayuntamiento la pone encima de la mesa. Ha sido ahora, sin embargo, cuando Urbanismo ha logrado el informe favorable de Patrimonio para poder conceder, a su vez, un informe favorable a una construcción en el solar que no reconstruya el frente original del edificio.

El inmueble, de 1946, gozaba de una protección especial antes del accidente de 2011, aunque no quedara clara la autoría. El libro "Historia urbana" publicado por la Universidad de Oviedo mantenía que era obra de Juan Vallaure, aunque su hijo, Rafael Vallaure, negó que perteneciera al catálogo del padre. El catálogo urbanístico de Oviedo afirma, por su parte, que es obra de Francisco y Federico Somolinos.

Las novedades sobre el edificio de la calle Argüelles, propiedad de la Universidad de Oviedo, comenzaron en el año 2010, cuando el entonces Rector, Vicente Gotor, lo propuso como sede del Centro Internacional de Posgrado, al calor del proyecto de Campus de Excelencia.

El edificio acogía entonces en sus bajos la tienda del servicio de publicaciones y el anuncio de reforma del inmueble provocó cierta polémica porque obligaba a desalojar a dos viudas de catedráticos y un catedrático jubilado y su esposa que todavía residían allí, en régimen de alquiler.

El proyecto de rehabilitación del edificio para convertirse en el CI de Posgrado tenía entonces un presupuesto de 1,6 millones con cargo a los dineros del Campus de Excelencia. Los trabajos de reforma empezaron pero en medio de la rehabilitación, el interior del inmueble se vino abajo el 28 de octubre de 2011.

Obligada a derrumbar también la fachada, la Universidad de Oviedo insistió primero en seguir con su proyecto, y un año después del accidente contaba con un proyecto muy ambicioso de Lumbo Arquitectos, que incluía una fachada vegetal en la parte sur y una zona transitable en el tejado. Aunque todavía respetaba la reconstrucción de la fachada original. Las estrecheces económicas obligaron a la Universidad a renunciar al proyecto y sacar el solar a subasta. Aunque la parcela salió en un precio de 1,6 millones, finalmente se adjudicó en 1.050.005 euros en diciembre de 2014 a una promotora local.

En 2015 los nuevos dueños de la parcela ya habían hecho pública su intención de construir viviendas de lujo (cinco plantas más un bajocubierta) y confiaban en no tener que reconstruir la fachada original, como así parece que han logrado finalmente según el reciente informe de Patrimonio y el acuerdo de Junta de Gobierno.