La comisión de Atención a las Personas donde ayer declararon durante más de cuatro horas el comisario de la Policía Local y tres funcionarios de este servicio vinculados a la tramitación de las tarjetas para aparcar libremente en la ciudad, sembró más dudas que luces en la polémica y aportó un dato nuevo: según el testimonio de dos funcionarios, en los últimos años hubo un cauce alternativo por el que determinadas peticiones de tarjetas que eran denegadas por el cauce ordinario acababan siendo autorizadas a través de un procedimiento alternativo.

Según coincidieron dos funcionarios vinculados a la tramitación de estas tarjetas, en varios casos, relacionados con empresarios, la solicitud llegaba al responsable de tramitarla, este la remitía al intendente informando negativamente y aquel al jefe de la Policía Local. Luego se generaba un expediente administrativo firmado por el concejal delegado denegando la tarjeta y devolviendo las tasas de expedición de documentos. Pero en varios de estos casos la tarjeta, tras este proceso, se autorizaba directamente sin pasar ya por ningún procedimiento. Más allá de esta nueva práctica irregular vinculada a la tramitación de tarjetas para aparcar, el tipo de documento relativo al coche del exalcalde Agustín Iglesias Caunedo (PP) centró buena parte de la comisión y de las declaraciones que posteriormente realizaron los distintos grupos políticos. Todos los grupos coincidieron en que el comisario indicó que la tarjeta de Caunedo sólo servía para circular por calles peatonales y no para aparcar en zona azul. Esta declaración de José Manuel López, jefe la Policía Local, sirvió al concejal del PP Gerardo Antuña para acusar al tripartito de "haber mentido a los ovetenses para seguir su cacería contra Caunedo". Para Antuña se trata de "un montaje indecente para sostener un gobierno que sólo sabe mentir, insultar, acosar, dividir, crispar y tensionar". El edil popular subrayó, además, que el funcionario responsable actualmente del servicio afirmó también que la tarjeta de Caunedo sólo era para circular por calles peatonales. Antuña volvió a atacar al concejal de Seguridad por haber permitido que se filtrara información sensible y por "mentira" sobre la existencia de un expediente. El responsable de Seguridad, Ricardo Fernández (PSOE), le replicó ayer mismo diciendo que nunca hubo información sobre nada que no estuviera documentado en la comisión y aseguró que no filtró ningún dato de carácter personal. "Me limité a facilitar información al resto de concejales". Más allá de este cruce de acusaciones, todos los grupos, a excepción del PP, incluido Ciudadanos, mostraron sus dudas sobre las explicaciones ofrecidas por José Manuel López referidas al permiso de Caunedo e insistieron en que para otros dos funcionarios un coche con una tarjeta de esas características no sería multado en ninguna ocasión estando mal aparcado.

Para Ana Taboada (Somos) hubo "varias contradicciones" dentro de la declaración del comisario. "Por un lado dijo una cosa y a preguntas del PP dijo otras". Para Luis Zaragoza (Ciudadanos) quedó claro que "el procedimiento era totalmente irregular y se concedían tarjetas sin razón jurídica alguna". Cristina Pontón (IU) afirmó que de la comisión se desprende que todo era un "sindiós" y que a ella no le ha quedado claro para que valía una tarjeta como la de Caunedo. El tripartito abrirá un expediente administrativo para depurar posteriormente responsabilidades.