"Aún no tenemos ningún tratamiento curativo que retrase la evolución de la enfermedad del párkinson. Las terapias avanzadas van dirigidas a que la dopamina alargue su efecto al máximo y el objetivo es que el paciente esté bien el mayor número de años". Así resumió su intervención la neuróloga del HUCA Marta Blázquez, que junto a sus colegas Esther Suárez San Martín, especialista en el diagnóstico de la enfermedad, y Manuel Menéndez, especialista en patología neurodegenerativa, participó en una mesa redonda organizada por la Asociación Parkinson Asturias. También acudieron los biólogos Juan Gómez de Oña, especializado en técnicas de secuenciación masiva del ADN, y Victoria Álvarez Martínez, responsable del Laboratorio de Genética del HUCA. Todos ellos coincidieron en resaltar que la enfermedad puede desarrollarse durante años sin dar apenas síntomas. "Por eso es tan importante lograr una detección precoz para poder iniciar cuanto antes los tratamientos", resaltó Esther Suárez. "Los tratamientos actuales son sintomáticos y van dirigidos a reponer la dopamina que falta en el cerebro", señaló Manuel Menéndez. Juan Gómez de Oña puso el énfasis en los estudios que se realizan con pacientes, fundamentales para determinar las claves de la evolución de la enfermedad. Victoria Álvarez recalcó la ardua labor de coordinación que se lleva a cabo en el HUCA.

Al acto, seguido por numeroso público, con la sala llena, también acudió Santiago García Martínez, presidente de la Asociación Parkinson Asturias. Pasado mañana se celebra la jornada internacional de la enfermedad del párkinson bajo el lema "Empeñados por el párkinson".