"Soy un delincuente sí, pero buena gente". Así se defiende Saúl R. P., el conductor que el martes fue detenido en Las Vegas (Corvera) tras huir desde Oviedo en una persecución de media hora en la que alcanzó velocidades de hasta 214 kilómetros por hora. Unas prisas que justifica porque "llevaba 5 ´pollos´ -gramos de cocaína- encima" que posteriormente aprovechó para tirar por la ventanilla. Hechos de los que se jactó esta misma mañana en el juzgado de guardia en el que conoció que el fiscal le pide un año de cárcel por un delito contra la seguridad del tráfico.

El hombre, vecino de Gijón, que se encuentra en libertad vigilada y con numerosos antecedentes, dijo importarle poco las consecuencias legales que le puede la fuga iniciada en la plaza de la Cruz Roja de Oviedo. "Me picaron a la ventanilla y dije: ´¿Cómo?´, a mi no me pilláis", relató el hombre que sacó pecho por la potencia de su vehículo. "Mi coche vuela y las motos de la policía no valen para nada", señaló, dejando claro que le pillaron por los pelos. "Si no me llego a confundir de calle no me cogen ni de coña", apunta.

Estas declaraciones tuvieron lugar justo antes del juicio rápido fijado para esta mañana en el que la defensa, a cargo de la abogada de oficio Amparo Morán, rechazó aceptar la condena propuesta por el fiscal para evitar el ingreso inmediato en prisión del acusado. "Trataremos de demostrar que las pruebas en el HUCA determinaron niveles más bajos de alcohol", explicó la letrada sobre el cliente que dio 0,54 miligramos de alcohol por litro de aire espirado en la prueba que se le realizó tras ser detenido. El caso se resolverá en un juicio penal que queda fijado para el jueves al mediodía.

Así fue la detención del conductor en Las Vegas

Así fue la detención del conductor en Las Vegas

Junto al acusado, asistió al juzgado su pareja, V. B. M., también vecina de Gijón, que reconoció haber agredido a los policías locales de Corvera, pero en defensa propia. "Un agente con casco le metió en un portal para pegarle y yo me revolví", señala la mujer, cuyo proceder no fue objeto de denuncia por parte de los policiales, pero ella no descarta tomar acciones legales. "Se les va a caer el pelo porque le esposaron, le tiraron al suelo y le pisaron la cabeza", asegura.

El propio conductor mostró su preocupación por recuperar su vehículo, el cual se encuentra en el depósito de Oviedo. "Es un chollo porque por el mismo precio que me costaba dejarlo allí, me lo trajeron hasta aquí", señaló para luego aclarar que recurriría a un amigo para recuperar el coche, al estar incapacitado él mismo por serle retirado el carné de conducir.