El Ayuntamiento de Oviedo autorizó este mediodía la reanudación de las fiestas de La Argañosa, que tienen lugar en el aparcamiento del Estadio Carlos Tartiere y que ayer fueron suspendidas en su totalidad al detectar la Policía Local que siete barracas infantiles "no cumplían los requisitos exigidos". El concejal de Festejos Roberto Sánchez Ramos aseguró que la reformulación de la solicitud, dejando fuera los carruseles infractores permitió dar luz verde a unos festejos que ayer vieron truncada hasta su primera verbena nocturna.

Sánchez Ramos aseguró que la propia comisión de festejos buscó un técnico en la misma tarde de ayer para elaborar una nueva solicitud que desde las ocho de esta mañana empezó a analizarse por los técnicos municipales. Una vez comprobado que se cumplían todos los requisitos, Festejos dio luz verde a la reapertura del recinto en el que se desarrollan las celebraciones.

El presidente de la comisión, Luis Ángel Gutiérrez, llama a pasar página sobre una incidencia que confía en que no manche la imagen de los festejos. "En 24 años no habíamos tenido ningún problema", apunta para luego señalar que sólo eran dos las barracas que no cumplían los requisitos y han quedado excluidas de la oferta lúdica de la fiesta. No obstante, considera que la medida fue muy drástica. "No es justo que suspendieran la feria entera", apunta.

A este respecto, Sánchez Ramos apunta que Festejos actuó para evitar riesgos innecesarios. "No podemos jugar con la vida de los niños", sostiene el edil que también asegura haber procedido teniendo en cuenta a los organizadores. "Tratamos de dar seguridad jurídica a los organizadores como máximo responsable", añade Sánchez Ramos.