La joven ovetense que colgó una fotografía en internet mofándose del asesinato de Miguel Ángel Blanco es hija de un guardia civil de la Comandancia de Oviedo que se encuentra en activo, según confirmaron ayer fuentes conocedoras del caso. La Guardia Civil, al igual que la Fiscalía, ha abierto una investigación y tiene previsto trasladar las diligencias a la Audiencia Nacional para que este órgano determine si los hechos son constitutivos de un delito de "descrédito, menosprecio o humillación a las víctimas del terrorismo o a sus familias". Quienes conocen a Irene Carril aseguran que es "una radical de extrema izquierda" que frecuenta los "grupos antinazis" de la ciudad y que ya se ha visto implicada "en varias peleas".

"Me tiró a puñetazos", dice una agredida por la ovetense que se burló de Miguel Ángel Blanco

Tiene 23 años y prefiere mantener su identidad en el anonimato por temor a posibles represalias, pero cuenta a LA NUEVA ESPAÑA cómo Irene Carril, la ovetense que colgó en su Facebook una macabra fotografía burlándose del asesinato de Miguel Ángel Blanco, la emprendió a golpes con ella cuando se encontraba disfrutando de una noche de copas con dos amigas en la calle Mon, en pleno casco antiguo de Oviedo. "Me tiró a puñetazos y empezó a darme patadas cuando estaba en el suelo", explica la chica, que a consecuencia de la paliza se pasó "casi dos semanas con collarín".

El suceso tuvo lugar el pasado 14 de marzo y el relato que sigue contiene la versión de la agredida. Asegura que todo está denunciado en el Juzgado. Irene Carril no respondió a las llamadas de este periódico.

La noche de la paliza era lunes. Era alrededor de la una y media de la madrugada y las tres chicas salieron de un bar de copas de la calle Mon para fumarse un cigarro. Irene Carril también salió al mismo tiempo del local junto con otros dos amigos. Cuando los dos grupos estaban a la puerta del bar pasaron otros tres jóvenes caminando calle abajo y ahí comenzó todo. "Empezaron a insultarles sin ningún motivo. Les gritaban que eran unos pijos de mierda y unos fachas", asegura la denunciante.

Como vieron que la actitud del grupo de Irene Carril "era desmesurada y sin razón alguna", las chicas hicieron algunas fotografías, pero les costó caro. "Los chavales a los que estaban insultado se fueron después de discutir un poco con ellos, pero a continuación vinieron a por nosotras", afirma la joven. "Nos reprocharon que estuviésemos haciendo fotos y comenzaron a pegarnos. Pero la que lo empezó todo fue ella", explica la joven haciendo referencia a Irene Carril. "Me cogió de los pelos, me dio puñetazos y patadas... Me pegó tanto que estuve casi dos semanas con un collarín", añade la joven agredida.

Pero ella no fue la única víctima. Mientras trataba de defenderse de los ataques de Irene Carril, un acompañante de la supuesta agresora se dirigió a sus dos amigas y también empezó a pegarles. "A una de ellas le rompió un diente y a la otra le dejó un brazo en cabestrillo al lesionarla en un hombro". Ese joven, "con estética de redskin", un "cabeza rapada" de extrema izquierda" o SHARP, está relacionado con el grupo "Bukaneros" -el colectivo ultra que sigue al equipo de fútbol del Rayo Vallecano- y fue detenido un mes más tarde en Madrid en relación a los hechos de aquella noche gracias a las fotografías aportadas a la Policía por las jóvenes ovetenses. "El que estaba con ellos, que era menor de edad por unos días, les estaba diciendo que se fueran y nos dejaron, pero de la que se iban había otro chico a la puerta de un bar cercano y el que le pegó a mis dos amigas le dio un botellazo en la cabeza sin venir a cuento". Al emprender la huida "seguían insultando y llamando a todo el mundo fachas de mierda".

Las tres chicas tuvieron que ser trasladadas al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), la que habla para este diario en ambulancia. Una vez en el centro sanitario se encontraron con el joven que recibió el botellazo, que presentaba una herida inciso-contusa con hemorragia activa en la cabeza. "No lo conocíamos de nada, pero todos estábamos allí por lo mismo", explica la denunciante.

Las tres chicas que fueron golpeadas iniciaron su propia investigación antes de acudir a declarar a Comisaría. Gracias a las fotos que habían hecho pudieron certificar que la joven que les había pegado, "la que montó todo el jaleo", era Irene Carril. "Empezamos a pasar las fotografías a los amigos y entre unos y otros dimos con su nombre", señala la joven. El caso, según la chica, está en los tribunales. "Lo denunciamos, nos hicimos los exámenes forenses pertinentes y estamos a la espera de que nos llamen del Juzgado", explica.

La foto de la polémica

Irene Carril colgó en su Facebook una fotografía suya junto a otro ovetense, Pelayo Serantes, en la que ambos aparecen mofándose del asesinato del concejal de Ermua. En la imagen están posando bajo la pancarta que se colocó en el Ayuntamiento de Oviedo en recuerdo del concejal del PP con motivo de los veinte años de su asesinato. Los dos aparecen haciendo un gesto con su mano que simula una pistola colocada sobre la sien. La publicación se completaba con el mensaje "Saluda al cielo" acompañado del emoticono de un revólver.

Como publicó ayer este periódico, Irene Carril ya se había hecho otra fotografía similar horas antes. En esa imagen aparece bajo la pancarta haciendo un gesto comúnmente conocido como "peineta", es decir levantando de forma obscena el dedo corazón en dirección a la imagen del concejal. A su lado hay otro joven con el pelo rapado que hasta el momento no ha podido ser identificado y que apunta con su mano simulando una pistola.