La avenida Presidente Adolfo Suárez, que discurre junto a los terrenos que rodean el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), no tiene suficientes rebajes de aceras. Así lo denunció ayer el vecino de La Corredoria Marcos Gómez, que lamentó las vueltas que tiene que dar con su silla de ruedas para recorrer esta arteria del barrio. Para encontrar un paso de cebra adaptado cuando sale de su casa en dirección al centro sanitario -denunció- tiene que dar un rodeo que retrasa su marcha. "Tardo el doble", indicó, para añadir que "hay mucha gente que no protesta contra esta situación porque tampoco sabe dónde tiene que hacerlo".

Para apoyar y llevar sus reclamaciones al Ayuntamiento de Oviedo, el concejal Eduardo Llano, del PP, se acercó ayer a la avenida Adolfo Suárez, que discurre entre la plaza Oviedo Moderno y una de las rotondas que dan entrada al HUCA. Que las aceras no estén rebajadas, criticó el edil, "perjudica gravemente a los vecinos en su día a día y les impide desplazarse de forma autónoma".

Para favorecer la movilidad, Llano pidió a la concejala de Infraestructuras, Ana Rivas (PSOE), que "comiencen a hacerse los rebajes ya". "Los vecinos de Oviedo no pueden esperar ni un minuto más para salir de forma digna de sus casas", señaló el edil popular, tras criticar que el gobierno local ha terminado un viejo proyecto de accesibilidad del anterior alcalde, Agustín Iglesias Caunedo, pero que lo ha hecho "mal y tarde".

Además de la necesidad de reducir los bordillos, Marcos Gómez pidió otras mejoras para la avenida Adolfo Suárez. Denunció que, cuando llueve, el agua arrastra por la acera la tierra del terreno junto al que discurre y que ésta se llena de barro. "Tienes que bajarte e ir por la carretera en dirección contraria", lamentó el vecino de La Corredoria. "No entiendo que hagan una construcción nueva y no piensen en los demás", añadió, crítico con que no se planificasen las necesidades de movilidad de las personas que utilizan sillas de ruedas cuando se abrió la calle, que se encuentra en una de las zonas más modernas de la ciudad. "No lo digo sólo por mí", destacó Gómez, ya que los rebajes, apuntó, también son muy útiles para los carros de la compra y los carricoches de bebés.