Pequeña remodelación del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Oviedo. A pequeña escala y dentro del grupo de Izquierda Unida. La concejala Cristina Pontón (Oviedo, 1973) acaba de asumir las áreas de gestión de Patrimonio, Estadística y Archivo, englobadas hasta ahora dentro del departamento de Interior y Personal del que se encarga el coordinador local de su partido, Iván Álvarez.

Álvarez cede, así, una parcela de sus responsabilidades a su compañera, la única de los tres concejales de la coalición (el tercero es Roberto Sánchez Ramos, al frente de Cultura) que hasta ahora había quedado fuera de las funciones del gobierno municipal.

La concejala es consciente de que la sección de gestión de Patrimonio, a la que llega con un refuerzo de personal ya aprobado, se enfrenta ahora a un par de proyectos de cierto calado. El primero, ya en marcha, es la aprobación de la nueva ordenanza de locales. El Ayuntamiento ya abrió un periodo de alegaciones, que acaba de concluir y ahora toca resolverlas y lograr, en palabras de la edil de Izquierda Unida, "un pacto con todas las fuerzas políticas". Es decir, un consenso entre todos los partidos que permita aprobar un modelo sólido sobre locales municipales, usos y cesiones.

Cristina Pontón también quiere abordar desde Patrimonio lo que ella denomina "bochornosa herencia del gabinismo", las 3.000 plazas de garaje de Cinturón Verde que el Ayuntamiento no logra vender y a las que pretende dar algún tipo de salida.

La puesta en marcha del museo de la cerámica de Faro o el estudio para mejorar la situación del Archivo municipal figuran también entre sus prioridades para estos dos años al frente de estas áreas.