"A diario, en las calles de Kinshasa (capital de la República Democrática del Congo) salvamos a decenas de personas enfermas que están siendo maltratadas en la calle a causa de los trastornos que padecen". Sor Ángela Gutiérrez, natural de Panes, miembro de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, fundó y dirige el centro Telema en Kinshasa (Congo), en el que trata a enfermos mentales y donde a diario se encuentra con situaciones de extrema dureza.

La hermana Ángela contó ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA una historia que habla de tesón y voluntad para sacar adelante a los que ella llama, "los más olvidados". La religiosa, que proyecta abrir un nuevo centro en el país congoleño, explicó que en las instalaciones tratan enfermedades con la medicación oportuna, pero el trabajo no se queda sólo ahí. "Ayudamos a los chicos a ser útiles a la sociedad y en algunos casos conseguimos que tengan estudios".

En su labor para salvar a personas estigmatizadas que llegan a ser repudiadas por su propia familia, sor Ángela cuenta con la ayuda de la Fundación El Pájaro Azul, cuya fundadora, Inmaculada González-Carbajal, resaltó la inmensa humanidad de la monja, "que no escatima horas para prestar servicio a quienes requieren su atención". Trinidad Deiros, periodista, corresponsal en Congo, describió la realidad del país como "un infierno en un lugar que podría ser el paraíso". Deiros se remontó al "terrible colonialismo belga" para explicar la situación social del Estado africano que destaca por la inestabilidad.