Miguel Ángel Tejada y Clara Eslava, los arquitectos que diseñarán la nueva entrada a la ciudad tras ganar el concurso internacional de proyectos acompañados en su equipo por David Gistau, de Gestión Integral del Suelo, son especialistas en "olfatear problemas de movilidad". Y creen que esa ha sido la gran baza y el motivo por el que el jurado les ha premiado como la mejor solución para la entrada de Oviedo.

Al teléfono, Tejada explica desde Madrid que llegaron al concurso de Santullano por un doble motivo. "Nos llamó la atención por lo interesante del ámbito urbanístico, por los procesos participativos y concursos previos y porque, vistas las bases, parecían bien convocadas, claras, y atractivas". El otro motivo es la pequeña conexión asturiana. Aunque los dos son navarros y estudiaron juntos en la Escuela de Arquitectura de Navarra, Clara Eslava tiene familia asturiana. "Su madre se crió en Asturias y conserva familia en Oviedo. Nos gusta mucho Asturias y seguimos viajando a la región cuando podemos".

El estudio Eslava y Tejada llegaba además al concurso con la experiencia de haber participado en otros proyectos de transformación urbana como el de la remodelación de la calle Serrano. En la actualidad, se han especializado también en espacios educativos y aulas infantiles, y asesoran al Ayuntamiento de Madrid y al de Pamplona en la construcción de nuevas escuelas infantiles".

Tejada es cauto a la hora de pensar en que los planteamientos tendrán que cuajar también con el nuevo plan general de ordenación que está en marcha. ¿Cuáles son? "Lo que diferencia nuestra propuesta del resto creo que ha sido la decisión de construir un bulevar, uno de verdad, es decir, una calle en la que se separan los tráficos se y genera un espacio central para la actividad del peatón".

La idea del lago y del bosque salió del interés, ya presente en los pliegos, de incorporar el elemento del agua, que a nivel funcional, en el proyecto de Eslava y Tejada "está pensado como un ciclo integral de circulación, de forma que el agua que recoge la zona se acaba gestionando en ese lago como elemento de retención".

El bosque apunta directamente, detalla "a la memoria de un bosque urbano, y creo que tiene que ver con ese recuerdo que tenemos nosotros de los bosques asturianos. Es como si hubiésemos llevado a la ciudad la memoria de los bosques asturianos". "Es una gran mancha verde que permite que se vayan salpicando de usos, huertos urbanos, áreas de juego, esparcimiento, merenderos, que permite activar muchos usos y mucha actividad".

Tejada también se mostró satisfecho al descubrir los nombres de los equipos con los que había competido. Algunos de ellos, como el caso de Pachi Mangado, fueron sus profesores en su época de estudiante en la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra.

Como Seúl

En el salón de plenos del Ayuntamiento se volvió a reunir ayer por la mañana la mesa jurado para hacer sumar las últimas valoraciones y abrir los sobres que dieron a conocer los proyectos ganadores. En la breve presentación de la propuesta "Bosque y valle" hablaron los concejales de Urbanismo, Ignacio Fernández del Páramo, Contratación, Iván Álvarez, e Infraestructuras, Ana Rivas.

Del Páramo, visiblemente ilusionado con el proyecto confió en que "a partir de ahora", y mientras "se vayan empezando a hacer las obras", Oviedo comenzará a ser "una referencia en el nuevo urbanismo igual que lo fue en su día Seúl o San Francisco, con la entrada al embarcadero, también un espacio diseñado para el uso público". Soñador, Fernández del Páramo confió incluso en que "quizás algún día tengamos que ir a explicar a otras ciudades del mundo cómo se desarrollan estos procesos de transformación urbana a un modelo más sostenible".

El edil Iván Álvarez, concejal de Contratación y presidente de la Mesa, quiso felicitar "a los seis seleccionados por la enorme calidad de sus propuestas" y añadió que "este es un proyecto pionero en la ciudad, y las propuestas lograron captar perfectamente las necesidades y demandas del proceso participativo previo, desde la protección medioambiental, un modelo urbanístico al servicio de las personas, la creación de un entorno saludable y la protección cultural del prerrománico de San Julián de los Prados".

Todos los concejales tuvieron ayer palabras de agradecimiento para el colectivo Imagina un bulevar, del que partió la primera necesidad de cambiar la morfología urbana de la entrada de la "Y" que permitiera "coser" los barrios. Un colectivo al que, precisamente, perteneció en su día el concejal de Urbanismo, y de donde salieron las recomendaciones elaboradas a través de un proceso participativo. Las demandas de aquel colectivo impulsaron en su momento otro concurso desarrollado por el PP, del que el grupo se alejó al considerar que vulneraba las necesidades de los vecinos.

Al nuevo resultado del proceso para buscar una solución a la "Y" se llega después de haber puesto en marcha otro proceso de participación, pero también un innovador modelo de contratación en el que una mesa-jurado realiza una valoración artística de los proyectos y un proceso de contratación administrativa abre una licitación a la que sólo se puede presentar quien haya ganado el concurso.

A esta peculiaridad se refirió ayer la edil de Infraestructuras, la socialista Ana Rivas. La concejala consideró un hecho de "lo más importante", haber recorrido todo este camino para la adjudicación del proyecto. "Habíamos vivido procesos parecidos con el Principado pero es la primera vez que lo hacemos nosotros. Es muy importante haber hecho primero las aportaciones de los ciudadanos, habérselo dado a los profesionales que se presentaron al concurso y que de ahí hayan salido doce propuestas de equipos que querían darle una imagen diferente a la entrada de la ciudad". A partir de ahora entra en juego la parte técnica del contrato. Una vez que se les adjudique a Eslava y Tejada, tendrán tres meses para la redacción del proyecto. Después, las obras están previstas en varias fases a lo largo de seis años. La buena noticia es que el proyecto tiene financiación asegurada en los fondos europeos Dusi.