"La gran energía del futuro será la de fusión nuclear no radiactiva, que se conseguirá en 25 o 30 años. Las llamadas energías alternativas serán de transición hasta que se consiga esa combustión a un precio asequible".

Así lo dijo ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA Rogelio Peón Menéndez, director del departamento de Tecnología de la ingeniería TSK, que participó en el ciclo de conferencias sobre el futuro de la energía, coordinado por la Asociación de Profesores Universitarios Santa Catalina. Peón, que fue presentado por Juan Ángel Martínez Esteban, catedrático de Tecnología Electrónica de la Universidad de Oviedo, destacó especialmente las posibilidades de la energía termosolar y aseguró que "todas las energías renovables necesitan aún una prima del Gobierno para subsistir en la situación actual, aunque hemos ganado mucho en todas ellas y seguirán creciendo".

También advirtió del gran interés de China por entrar en el mercado de las renovables. "Como nos descuidemos nos comerán el mercado; no podemos bajar la guardia", señaló. Peón habló de diferentes proyectos de plantas solares en enclaves como el desierto de Atacama. "Las plantas que tenemos en España son de juguete en comparación con las que se están haciendo en otras zonas del mundo", aseguró.

También explicó que la energía solar térmica o energía termosolar consiste en el aprovechamiento de la energía del sol para producir calor o para producción de energía mecánica y a partir de ella energía eléctrica.

Rogelio Peón es doctor ingeniero industrial y cuenta con dieciséis años de experiencia en el campo de la microelectrónica (diseño de circuitos integrados) y quince años en el campo de las plantas de generación de energía convencionales y renovables. Actualmente dirige el departamento de Tecnología de TSK en el campo de la energía, con presupuestos que superan los 1.000 millones de euros.