El amor llenó ayer el tanatorio Ciudad de Oviedo. Centenares de amigos y compañeros de trabajo arroparon a la familia de Jesús "Chus" Díaz González, el coordinador de sistemas del Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) que falleció en la madrugada de Nochebuena de forma súbita a los 54 años.

Casado con la artista y diseñadora ovetense Brezo Rubín, era padre de dos hijas, Carmen y Coloma. "Fue un referente en todos los sentidos y el alma mater del departamento. Va a ser casi imposible continuar trabajando sin él". Alejandro Fernández fue uno de los muchos colegas de profesión que se deshizo en elogios a Chus Díaz, cuya muerte cayó como un mazazo en su entorno, completamente desolado por la pérdida.

El fallecido había pasado la Nochebuena con su familia en una casa rural y después de una velada en la que no dio signos de encontrarse mal, decidió acostarse para, al poco, perder la vida.

Fermín González Nieto, compañero del Sespa desde hace quince años, le definió como "un hombre volcado con la ciudadanía, sincero, franco y directo que le hacía a los demás la vida más fácil al luchar por los derechos laborales o personales de cada uno". La familia celebró ayer un acto íntimo de honras fúnebres en la capilla del tanatorio y esta tarde, a las 17 horas, se celebrará el funeral en la iglesia Corazón de María.