El hombre acusado de "abandonar a su suerte" a una perra en una finca de la localidad ovetense de Trubia ha aceptado esta mañana seis meses de cárcel, tres menos de los que pedía el Fical. l animal, de raza pit-bull, logró salvarse "in extremis" tras la llamada de un particular a la Policía, según recoge el propio escrito del Fiscal.
En el juicio celebrado esta mañana se alcanzó un acuerdo de conformidad. El Ministerio Público considera que los hechos son constitutivos de un delito de maltrato de animal doméstico y pedía también para el acusado la "inhabilitación especial para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga que ver con animales, así como para la tenencia de estos durante tres años". Finalmente esta pena se ha visto rebajada a dos años en ambos caso.
El Ministerio Fiscal sostiene que el acusado, en fechas no concretadas pero en todo caso desde finales de junio del año 2016, era el "propietario o cuidador" de una perra adulta color canela. El animal se encontraba en el interior de una finca en la localidad de Piedrallasa, en Trubia. Cuando la perra fue localizada estaba "en una caseta en ruinas con el suelo lleno de cascotes, bordes afilados y objetos salientes, abandonada a su suerte", ya que el acusado, por motivos que se desconocen, "cesó voluntariamente de atenderlo en sus necesidades básicas, tales como proporcionarle agua y comida", según recoge literalmente el escrito de la Fiscalía. El Ministerio Público recalca que el hombre "tampoco limpiaba la zona" en la que se encontraba el animal.
La perra vivía "entre heces abundantes y sin acceso a agua", lo que le provocó "una merma física importante". Estaba desnutrida, "se le veían todos los huesos y tenía múltiples úlceras provocadas por su extrema delgadez y por estar tirada sobre cemento", sostiene el Ministerio Fiscal para sostener su acusación.
Atención inmediata
Esta situación, siempre según la versión de la Fiscalía, provocó que el día 2 de diciembre de 2016, a instancias de un particular, interviniese la Policía Local de Oviedo, que llevó al animal a una clínica veterinaria con la intención de salvarle la vida. En ese centro la perra fue atendida "de sarna sarcóptica y de su estado general", llegando a recuperarse gracias a los tratamientos y cuidados recibidos.
El Fiscal solicitaba también que el acusado se haga cargo de las costas procesales y de indemnizar a la clínica veterinaria que atendió al animal "con la cantidad que se determine en concepto de gastos asistenciales". En el acuerdo alcanzado esta mañana en el Juzgado de lo Penal número 3 de Oviedo el acusado aceptó el pago de la indemnización al veterinario.
